
Los precios del petróleo cayeron el viernes, lastrados por los decepcionantes datos de empleo en Estados Unidos, lo que generó temores de una disminución de la demanda, a pocos días de la reunión de la OPEP+.
El precio del barril de crudo Brent del Mar del Norte para entrega en octubre, cuyo primer día es utilizado como contrato de referencia, cayó un 2,83%, hasta los 69,67 dólares.
Su equivalente estadounidense, el crudo West Texas Intermediate para entrega en septiembre, retrocedió a su vez en 2,79%, hasta los 67,33 dólares.
«Los mercados están siendo sacudidos (…) por los titulares económicos», con «datos sobre el empleo en Estados Unidos insatisfactorios», declaró a la AFP Stephen Schork, de The Schork Group.
El mercado laboral estadounidense se deterioró en julio, debido sobre todo a la incertidumbre generada por las guerras comerciales iniciadas por el presidente Donald Trump, con una tasa de desempleo que ascendió al 4,2%, en comparación con el 4,1% de junio.
La creación de empleos se situó en 73.000 el mes anterior, y las previsiones de mayo y junio se revisaron a la baja, alcanzando niveles desconocidos desde la pandemia de Covid-19.
La preocupación por la economía estadounidense, el mayor consumidor mundial de crudo, provocó una caída de los precios del petróleo.
«Los inversores realizaron compras masivas a principios de semana», impulsados por el riesgo de sanciones estadounidenses al crudo ruso si Moscú no pone fin a la guerra en Ucrania antes del 8 de agosto, dijo Schork.
El mercado también está a la espera de la reunión del domingo de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados (OPEP+), que podría aumentar su límite de producción en 548.000 barriles diarios para septiembre.