
Google Translate no quiere ser solo el traductor que todos usamos para salir de apuros. La aplicación ahora está probando una función llamada “Práctica”, que pinta perfecta para aprender idiomas, casi como un Duolingo versión Google.
¿Cómo funciona? Fácil: después de traducir algo, te sale un ícono con un birrete (como el de graduación). Ahí entras y eliges el idioma que quieres aprender y tu nivel. La aplicación te tira ejercicios cortos, escenarios como “saludos”, “comida” o “bebidas”, y hasta puedes armar tus propios temas. Todo con práctica diaria y retroalimentación rápida, para que le cojas el suelo sin aburrirte.
Por ahora está en prueba y solo algunos en Rusia lo tienen, pero todo apunta a que pronto lo soltarán para todo el mundo.
Con esta movida, Google Translate deja de ser solo “traduce y ya” y se mete de lleno a competir con apps como Duolingo. O sea, si esto pega, millones podrán aprender y practicar idiomas sin salir de la misma app que ya todos tenemos en el celular.