
El riesgo de redadas de la policía migratoria estadounidense en sus conciertos llevó al cantante puertorriqueño Bad Bunny a decidir no actuar en Estados Unidos durante su próxima gira mundial, según declaró a la revista británica i-D.
«Hubo muchas razones por las que no fui a Estados Unidos, y ninguna fue por odio», explicó el músico de 31 años en una entrevista publicada el miércoles, citando en particular el «problema» de la posible presencia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) frente a sus salas de conciertos.
«Es algo de lo que hemos hablado y que nos preocupaba mucho», añadió el artista, que el domingo finaliza una residencia de 30 conciertos que impulsó el turismo en su isla natal, Puerto Rico, territorio caribeño vinculado a Estados Unidos.
«Los estadounidenses podían venir (aquí) a ver el espectáculo. Los latinos y puertorriqueños de Estados Unidos también podían venir aquí, o a cualquier otra parte del mundo», señaló el artista, cuya gira pasará por Latinoamérica, Australia y Europa entre noviembre de 2025 y julio de 2026.
Con la política de detenciones masivas del presidente Donald Trump contra lo que él denomina migrantes ilegales, el número de personas detenidas por la policía migratoria estadounidense alcanzó la cifra récord de 60.254 en junio (frente a las 40.500 de enero, antes de su regreso a la Casa Blanca), según un análisis realizado por la AFP a partir de datos oficiales.
En Puerto Rico, donde el ICE también opera, 500 inmigrantes -en su mayoría dominicanos-, fueron detenidos en los cuatro meses siguientes al regreso de Trump al poder, informó una responsable local de esta agencia, Rebecca González-Ramos, en una entrevista en la radio pública estadounidense NPR.
En junio, el propio Bad Bunny publicó en sus redes sociales el video de una intervención en la isla.