
El café no solo es una bebida; es cultura, identidad, gusto. Un reciente mapa elaborado por Coffeeness analiza las búsquedas de Google para identificar cuál es el tipo de café más popular en cada país del mundo. Aunque no es un estudio científico riguroso, los resultados permiten observar patrones interesantes sobre cómo consumimos café en distintas regiones.
Hallazgos principales
- Capuchino como favorito global: Se identifica al capuchino como la preparación armadora del ranking. En 24 países —incluyendo España— aparece como la bebida preferida frente a otras elaboraciones.
- Espresso fuerte y concentrado: En 14 naciones, este café puro, de sabor intenso, es el favorito. Países como Alemania y Estados Unidos encabezan esta categoría —lo que sugiere un gusto creciente por cafés con cuerpo.
- Café de filtro: En 12 países es el tipo de café más buscado, incluyendo lugares tan diversos como Sudáfrica, Emiratos Árabes Unidos y Bulgaria.
- Preferencias locales fuertes:
- En Italia, el café americano (una versión del espresso aligerado con agua) domina las búsquedas.
- En Turquía, el café turco conserva su vigencia como bebida tradicional, y es el favorito nacional.
- El café turco ha sido reconocido como Patrimonio Cultural Inmaterial en su país de origen.
Matices y advertencias
- Fuente de datos: Las conclusiones se basan en datos de búsquedas en Google, no en encuestas o registros de venta. Esto significa que mide lo que la gente busca, más que lo que realmente consume o lo que realmente prepara en casa. Puede haber disparidades entre interés e intención o acción real.
- Variaciones culturales: En muchos países el tipo de café popular tiene que ver con la tradición, la infraestructura (qué máquinas hay disponibles), los hábitos sociales y los costos. Por ejemplo, mientras en algunas regiones domina el café fuerte, en otras se busca algo más suave o mezclado.
- Cambios en el consumo: El uso creciente de cafeterías especializadas, máquinas domésticas avanzadas y el interés por café de especialidad pueden estar influyendo en los patrones —muchos países podrían cambiar sus preferencias con el tiempo.
Implicaciones
- Para el mercado cafetero
Las empresas productoras, distribuidores y cafeterías pueden usar esta información para adaptar su oferta según los gustos locales: blends más cremosos, opciones de espresso puro, variantes de filtro, etc. -
Para la cultura del café
Que preparaciones tradicionales como el café turco sigan vigentes, o que países con fuerte tradición de espresso opten también por bebidas más suaves, da espacio para innovación y fusión cultural en torno al café. -
Promoción de lo local
En muchos lugares, el café no es solo una bebida, sino un elemento cultural que puede servir para promover identidad, turismo, tradición y producción local de café.
Este mapa mundial no da respuestas definitivas, pero sí provoca reflexión: muestra que hay tendencias globales (como el gusto por el capuchino), pero también fortalezas locales y peculiaridades muy marcadas. Los gustos cafeteros no son universales, y las elecciones que hacemos a diario reflejan historia, cultura, economía y acceso.