
SD. Representantes de micro, pequeñas y medianas empresas (MIPYMES) reiteraron este martes su profunda preocupación por la falta de respuestas y justicia ante las presuntas irregularidades cometidas en las licitaciones del Programa del Almuerzo Escolar, bajo la responsabilidad del Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (INABIE).
A través de la consultora Elizabeth Beriguete, las MIPYMES afectadas advirtieron que los errores del pasado no deben repetirse bajo la nueva administración, con un contundente llamado: “No más impunidad, no más abusos”. Beriguete subrayó que las destituciones de los exfuncionarios Víctor Castro y Cecilio Rodríguez estuvieron sustentadas en pruebas documentadas de corrupción, lo que demuestra que las denuncias no eran meras conjeturas, sino hechos verificables que han lesionado la credibilidad institucional y la sostenibilidad de los suplidores.
La denuncia en la PEPCA y las irregularidades
Los suplidores recordaron que el 15 de julio de 2025, presentaron una denuncia formal ante la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (PEPCA), respaldada por una auditoría forense. En esta acción, solicitaron una investigación penal contra el instituto y los funcionarios responsables.
En su denuncia, señalaron que la actual gestión del INABIE no ha mostrado interés en investigar las “cocinas deficitarias” y las “fantasmas”, el uso de testaferros ni en corregir las violaciones a los pliegos de condiciones.
Concentración de contratos y MIPYMES afectadas
Los empresarios denunciaron que persiste una preocupante concentración de más de 660 mil raciones alimenticias, con un valor superior a los RD$22 mil millones, en manos de grupos ajenos al sector de las MIPYMES.
En paralelo, unas 272 empresas permanecen en lista de espera, 232 fueron inhabilitadas sin fundamentos claros y otras 406 sufrieron reducciones arbitrarias de sus contratos, afectando directamente su capacidad operativa y financiera.
Un ejemplo emblemático de estas irregularidades es el de la empresa El Sabor de Doña Ciri SRL, que firmó un contrato para suplir 818,213 raciones por un monto de RD$69.7 millones. Sin embargo, tras recibir un anticipo, solo se le permitió entregar 316,400 raciones debido a una reducción unilateral, lo que generó deudas pendientes y serias pérdidas económicas.
En un comunicado, los suplidores afectados fueron enfáticos: “No aceptaremos un borrón y cuenta nueva que ignore las pruebas y el daño causado. Las MIPYMES no serán silenciadas. Exigimos auditoría, reparación y transparencia.”
Los empresarios concluyeron que la credibilidad del INABIE y el futuro del Programa de Alimentación Escolar dependen de acciones concretas que garanticen la justicia y la equidad en la asignación de contratos, asegurando que los errores del pasado no queden sin consecuencias.