
En 2021, el bloqueo del canal de Suez no solo paralizó el comercio global durante varios días, sino que también generó una ola de memes en internet. Aquel episodio dejó en evidencia algo clave: existen lugares en el mundo donde un simple obstáculo puede causar pérdidas millonarias y un efecto dominó en la economía global. Estos sitios son conocidos como puntos de estrangulamiento marítimos.
¿Qué son los puntos de estrangulamiento marítimos?
Son pasos estrechos, naturales o artificiales, donde la geografía obliga a concentrar el tráfico de barcos. Su relevancia es enorme, ya que gran parte del comercio internacional depende de ellos. Pero esa misma importancia los convierte en vulnerables: un accidente, un conflicto o incluso fenómenos climáticos extremos pueden interrumpir el flujo de mercancías.
Bab el-Mandeb: la llave del Mar Rojo
Ubicado entre Yemen, Yibuti y Eritrea, este estrecho conecta el Mar Rojo con el océano Índico. Todos los barcos que atraviesan el canal de Suez deben pasar por aquí. Aunque tiene unos 30 km de ancho —más amplio que Suez—, enfrenta amenazas como la piratería, los conflictos regionales y tormentas extremas. Cualquier problema en Bab el-Mandeb tendría un efecto devastador sobre el transporte marítimo mundial.
Estrecho de Malaca: el corredor de Asia
Entre Malasia y Sumatra se encuentra otra arteria vital: el estrecho de Malaca. Es responsable de la mayoría del tráfico marítimo que conecta Asia oriental con Occidente. Aunque existen rutas alternativas como Lombok, estas suponen grandes desvíos y costos adicionales. Además, el área ha sufrido en el pasado de piratería y de problemas de visibilidad por los incendios forestales en Sumatra.
Canal de Panamá: la ruta de las Américas
Inaugurado en 1914, conecta el Atlántico con el Pacífico y es esencial para el comercio entre Asia, Europa y las Américas. Sin embargo, el canal no está exento de riesgos: sus esclusas representan puntos vulnerables que podrían fallar por causas mecánicas, fenómenos meteorológicos extremos o incluso ciberataques. Aunque estos escenarios no son comunes, un bloqueo tendría consecuencias globales inmediatas.
Estrecho de Gibraltar: la puerta del Mediterráneo
Con apenas 15 km de ancho, el estrecho de Gibraltar conecta el mar Mediterráneo con el océano Atlántico. Estratégicamente importante desde la antigüedad, hoy es clave para el comercio entre Europa, África y América. Aunque no puede ser bloqueado por un solo barco, en un escenario bélico sí podría cerrarse al tráfico marítimo, generando un impacto descomunal en la economía mundial.
Una red vulnerable
Estos son solo algunos ejemplos, pero existen otros puntos de estrangulamiento igualmente críticos, como el estrecho de Ormuz —clave para el transporte de petróleo del Golfo Pérsico—. Lo cierto es que la economía mundial depende en gran medida de rutas que, a pesar de su aparente solidez, pueden ser extremadamente frágiles frente a accidentes, tensiones geopolíticas o desastres naturales.