
El programa televisivo El Show del Mediodía fue escenario de una grave denuncia interpuesta por Aracelis Aguasanta, madre de una joven cadete, quien alega que su hija fue víctima de una supuesta agresión sexual dentro de la academia militar. La señora Aguasanta señaló que, a varios meses de la denuncia, el expediente no avanza en el Ministerio Público de San Cristóbal, llegando a afirmar que está «archivado» o que «no aparece».
La madre de la cadete relató que la denuncia inicial fue interpuesta el 27 de mayo ante la Dirección de Asuntos Internos de la Policía Nacional. Según su testimonio, el subdirector de Asuntos Internos logró la identificación del presunto agresor, el Comandante Luciano, mediante una videollamada de vigilancia con la cadete, quien se encontraba en formación con sus compañeros. Este método, sin embargo, generó una alerta en la academia, donde, según la señora Aguasanta, el director se presentó horas después «vuelto una fiera» a increpar a la cadete por acudir a Asuntos Internos.
La cadete fue trasladada al día siguiente (28 de mayo) a San Cristóbal para realizar pruebas médicas y formalizar la denuncia. La señora Aguasanta cuestionó que en las instalaciones del Ministerio Público no hubiera cámaras de seguridad en funcionamiento, ni se permitiera a los cadetes portar teléfonos para tener evidencia de algún incidente. Además, la madre indicó que la Fiscalía de San Cristóbal no ha iniciado las diligencias para investigar las pruebas tecnológicas, las cuales incluirían la geolocalización de dispositivos que demostrarían que el agresor estuvo en la casa de la víctima. El abogado de la familia sostiene que el informe médico (INACIF) no mostró desgarros, un punto que el panel televisivo cuestionó como única medida de prueba en casos de agresión sexual.
El caso tomó un giro adicional cuando, después de seis días de estar con las autoridades, la cadete fue notificada de su cancelación de la academia el 4 de junio. Aunque las autoridades alegaron bajo rendimiento académico en una materia, la madre y el panel del programa sospechan de una posible represalia por la denuncia interpuesta, señalando la inoportunidad de la cancelación mientras el caso estaba pendiente.
Diego Pesqueira, director de comunicaciones de la Policía Nacional, intervino en el programa para informar que la institución recibió a la madre y a la joven, y que inmediatamente se procedió a la suspensión en funciones del oficial señalado. No obstante, Pesqueira reiteró que el caso fue remitido al Ministerio Público de San Cristóbal, ya que la Policía no puede investigarse a sí misma en un asunto de esa sensibilidad. También confirmó que la baja de la cadete se debió a temas académicos, aludiendo a que otros cadetes reprobaron la misma materia.
La situación ha provocado un enérgico llamado del programa a la Procuradora General, Yeny Berenice Reynoso, pidiéndole que asuma el caso personalmente ante la aparente inacción de la Fiscalía de San Cristóbal y la desaparición del expediente, que lleva cuatro meses sin avances.
Nota: En el mismo segmento, un abogado, que representa a otros 11 cadetes, alegó que la cancelación de esos alumnos se había realizado mediante la supuesta falsificación de un telefonema del jefe de la policía, un tema que el conductor del programa no permitió que se mezclara con la denuncia de agresión sexual.