
La concentración de dióxido de carbono en la atmósfera registró el año pasado un aumento sin precedentes, advirtió el miércoles la ONU, que pidió acciones urgentes para reducir las emisiones.
«En 2024 la concentración de dióxido de carbono en la atmósfera experimentó un incremento sin precedentes y marcó un nuevo máximo», indicó la Organización Meteorológica Mundial (OMM) en un informe.
Se trata del «mayor incremento desde que comenzaron las mediciones modernas en 1957», agregó esta agencia de la ONU.
La OMM precisó que los nuevos récords fueron alcanzados por los tres principales gases de efecto invernadero: el CO2, el metano (CH4) y el óxido nitroso (N20).
En su informe anual, la agencia de la ONU señaló como responsables de estos aumentos las emisiones continuas de CO2 provenientes de las actividades humanas y el incremento de los incendios forestales.
También citó la reducción de la absorción de CO2 por los ecosistemas terrestres y los océanos, lo que amenaza con convertirse en un «círculo vicioso climático».
El año pasado también fue el más caluroso jamás registrado, superando el anterior récord de 2023, recordó la OMM.
«El calor atrapado por el CO2 y otros gases de efecto invernadero amplifica las condiciones climáticas e intensifica los fenómenos meteorológicos extremos», declaró en un comunicado la secretaria general adjunta de la agencia, Ko Barrett.
«Por lo tanto, es fundamental reducir las emisiones, no solo por nuestro clima, sino también por nuestra seguridad económica y el bienestar de la población», añadió.