
El sueño de vivir legalmente en Estados Unidos se torna más costoso para miles de inmigrantes. Una nueva tarifa de $1,000 dólares fue aprobada como parte de las reformas impulsadas por el gobierno del expresidente Donald Trump, generando preocupación entre quienes buscan regularizar su estatus migratorio.
El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) confirmó la medida a través de una alerta oficial, en el marco de la llamada ley “One Big Beautiful Bill”. Aunque los detalles aún no han sido publicados en el Registro Federal, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) adelantó que la disposición entrará en vigor próximamente y que se especificarán las excepciones, fechas y consecuencias para quienes no realicen el pago a tiempo.
Golpe a los solicitantes de parole
La tarifa afectará principalmente a quienes soliciten el permiso de permanencia temporal (parole), una figura clave para muchos inmigrantes en proceso de regularización. Según USCIS, el cobro aplicará tanto para las solicitudes iniciales como para las renovaciones del permiso, conocidas como “re-parole”.
A partir del 16 de octubre de 2025, los solicitantes que califiquen para la aprobación de su trámite recibirán una notificación con las instrucciones y el plazo límite de pago. Si no se cumple con este requisito, el permiso no será otorgado. La agencia aclaró que la tarifa está sujeta a ajustes anuales por inflación, lo que podría aumentar el monto en los próximos años.
Trámites migratorios cada vez más costosos
Desde julio, USCIS ha comenzado a implementar nuevas tarifas en diversos procesos migratorios, en cumplimiento con la Ley de Reconciliación H.R. 1, aprobada por el Congreso bajo la actual administración republicana. Estas medidas elevan los costos de trámites esenciales como el asilo, el permiso de trabajo y el Estatus de Protección Temporal (TPS), afectando directamente a quienes buscan estabilidad legal en el país.
Los incrementos también impactan a turistas internacionales, al aumentar el costo del Formulario I-94 y del permiso ESTA (Sistema Electrónico de Autorización de Viaje). Además, se estableció una tarifa adicional de $250, denominada “tarifa de integridad de visa”, aplicable a los visitantes extranjeros.
El gobierno de Trump ha reiterado en múltiples ocasiones que las visas estadounidenses son un privilegio, no un derecho. Con esta nueva estructura de costos, miles de inmigrantes podrían ver más lejos su objetivo de legalizarse, en medio de un panorama económico y migratorio cada vez más restrictivo.