El papa León XIV renovó este martes sus críticas a las políticas migratorias del presidente estadounidense Donald Trump, y condenó el trato «extremadamente irrespetuoso» hacia los migrantes en Estados Unidos.
«Tenemos que buscar formas de tratar a las personas con humanidad», declaró en inglés a los periodistas frente a su residencia secundaria cerca de Roma.
Aunque afirmó que «todos los países tienen derecho a determinar quién, cómo y cuándo entra la gente», hubo personas que «vivían una buena vida, muchas de ellas desde hacía 10, 15 o 20 años» y que fueron tratadas de una manera «extremadamente irrespetuosa».
El pontífice pidió a «todo el pueblo de Estados Unidos que escuche» a la Conferencia Episcopal Católica de Estados Unidos, que en una inusual declaración la semana pasada instó a poner fin al «clima de miedo».
El papa, nombrado en mayo, se convirtió en un crítico cada vez más férreo de las políticas de la administración Trump.
León XIV también abordó la situación en Nigeria, que está en conversaciones con Estados Unidos tras las amenazas de Trump de intervenir militarmente por el asesinato de cristianos a manos de yihadistas.
Nigeria, con 230 millones de habitantes, está dividida aproximadamente en partes iguales entre un sur predominantemente cristiano y un norte de mayoría musulmana.
Es escenario de numerosos conflictos, entre ellos insurgencias yihadistas que matan tanto a cristianos como a musulmanes, a menudo de forma indiscriminada.
El papa dijo que en ciertas zonas de este país de África occidental «sin duda existe peligro para los cristianos, pero también para toda la población. Se ha masacrado tanto a cristianos como a musulmanes».
«Hay una cuestión de terrorismo. Hay una cuestión que tiene mucho que ver con la economía, por así decirlo, y con el control de las tierras que poseen», afirmó.



