La Bahía de Samaná, uno de los tesoros ecológicos de la República Dominicana, enfrenta un desafío silencioso bajo sus aguas. La proliferación del Camarón Tigre Gigante (Penaeus monodon), una especie exótica invasora, ha puesto en marcha una investigación crucial liderada por la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (UNPHU), recientemente galardonada con el prestigioso Sello ABS RD.
Aunque este crustáceo fue introducido en el país para acuicultura en los años 80, su escape al medio silvestre ha tomado un giro alarmante en la actualidad. Su presencia en Samaná no es solo una curiosidad biológica; representa un peligro real para:
Especies Nativas: Compite directamente por recursos y espacio con los camarones locales.
Economía Local: Amenaza el sustento de más de 3,400 familias de pescadores en la comunidad de Sánchez.
Biodiversidad: Su voracidad podría alterar el equilibrio del ecosistema marino de la zona.
Ciencia rigurosa: ¿Cómo se estudia al invasor?
Bajo el liderazgo de la Dra. Marcia J. Beltré-Díaz y con el respaldo de FONDOCyT, un equipo multidisciplinario está analizando si esta especie se establecerá de forma permanente. Para ello, ejecutan tres frentes científicos:
Análisis Biométricos y Gonadales: Determinan el crecimiento y la capacidad reproductiva de la especie en aguas dominicanas.
Muestreo de Postlarvas: Evalúan qué tan rápido se están multiplicando en la bahía.
Contenido Estomacal: Analizan qué están comiendo para medir el nivel de depredación sobre las especies nativas.
El reconocimiento Sello ABS RD otorgado a la Dra. Beltré-Díaz subraya que esta investigación no solo busca datos, sino que se realiza bajo los más altos estándares éticos del Protocolo de Nagoya. El proyecto une a instituciones como la UASD, FAO y CODOPESCA en un esfuerzo común por la conservación.
«Los resultados serán vitales para establecer medidas que aseguren que la pesca siga siendo una fuente de alimento y trabajo sostenible para la gente de Samaná», afirma el equipo de investigación.
¿Qué sigue para Samaná?
Los hallazgos de este estudio permitirán crear planes de manejo para controlar la población del camarón tigre y proteger la biodiversidad marina, garantizando que el sustento de miles de dominicanos no desaparezca ante esta invasión silenciosa.
