LOS ÁNGELES. Un coreógrafo australiano dijo el jueves que Michael Jackson abusó sexualmente de él durante siete años cuando era niño, una aseveración que los albaceas del patrimonio de la estrella calificaron de «indignante y triste».
Wade Robson -quien testificó durante el publicitado juicio por abuso sexual contra Jackson en 2005 diciendo que la estrella jamás lo tocó-, dijo en una entrevista televisiva que el «rey del pop» era un «pedófilo y un abusador sexual infantil».
«Abusó sexualmente de mí desde que tenía siete años hasta los 14 (…) Cometió actos sexuales en mí y me forzó a hacerle actos sexuales», dijo el bailarín de 30 años al programa «Today» del canal NBC, sin dar más detalles.
Estas nuevas acusaciones salieron a la luz por primera vez la semana pasada, cuando la prensa local reportó que Robson había entablado una demanda en Los Ángeles, el 1 de mayo, acusando de abuso sexual infantil al artista fallecido en 2009 a los 50 años.
Los documentos legales estaban clasificados, pero el abogado de Robson, Henry Gradstein, dijo a la AFP que «Michael Jackson era un monstruo y, en su corazón, cualquier persona normal lo reconoce».
En el juicio de 2005, Jackson fue absuelto de todos los cargos.
Este jueves, Robson explicó a su entrevistador Matt Lauer la razón por la cual ahora lanza acusaciones que contradicen el testimonio que dio bajo juramento en el juicio por pedofilia.
«No es un caso de memoria reprimida», dijo. «Nunca olvidé lo que Michael me hizo. Pero yo era totalmente incapaz, psicológica y emocionalmente, de entender que se trataba de abuso sexual».
Afirmó que Jackson le «lavó el cerebro» y lo llamó antes de su testimonio en la corte en 2005 para advertirle que no dijera la verdad o ambos irían a prisión, si bien negó que le hubieran pagado por mentir.
Howard Weitzman, abogado de los administradores del patrimonio de Michael Jackson, indicó en un comunicado que Robson «ahora quiere hacernos creer que cometió perjurio (…) para demandar dinero».
«Su demanda llega cuatro años después de la muerte de Michael. Es indignante y triste», afirmó.
