El procurador general de la República desconoce si Estados Unidos tiene intenciones de pedir en extradición a Pascual Cordero Martínez, alias “El Chino”, quien es acusado de narcotráfico y lavado de activos.
Francisco Domínguez Brito expresó ayer que hasta el momento no ha recibido información de una solicitud de extradición hecha por Estados Unidos y que hoy dará datos más concretos.
La información respecto a si fue pedido o no por el Gobierno norteamericano la dará luego de sostener una reunión con Gisela Cueto, procuradora general adjunta y directora del Departamento de Asistencia Jurídica Internacional y de Extradición.
El procedimiento de extradición en República Dominicana se inicia con una nota diplomática del país requirente al Ministerio de Relaciones Exteriores a través de su departamento jurídico, el cual posteriormente lo remite a la Procuraduría General de la República, explicó el abogado Carlos Balcácer. Señaló que una vez analizado el expediente, la procuraduría deposita una instancia ante la secretaría de general de la Suprema Corte de Justicia y ésta la tramita a la Segunda Sala Penal, que es la facultada para conocer en única instancia la solicitud de extradición.
Dijo al periódico El Caribe, que a dicho tribunal le corresponde dictar medida de coerción contra el solicitado así como a sus bienes por su vinculación con el delito y juzgar si procede o no la extradición.
Refirió que ya juzgada la solicitud, en el caso de que proceda, se dicta una sentencia que va al Poder Ejecutivo y es el presidente de la República quien tiene la última palabra. A través de un decreto dice si acoge o niega la extradición así como las penas a imponer, las cuales nunca serán mayores a 30 años de prisión que es la pena máxima establecida en el país. El presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas, Julio César Souffront Velázquez, favoreció que Cordero sea judicializado en el país.
