Los fabricantes de automóviles Hyundai y Kia deberán ofrecer reparaciones gratuitas a millones de vehículos vendidos en Estados Unidos, tras alcanzar un acuerdo nacional liderado por el fiscal general de Minnesota, Keith Ellison, y respaldado por más de 30 estados.
El acuerdo surge luego de que las autoridades determinaran que varios modelos de ambas marcas no contaban con la tecnología antirrobo adecuada, lo que los hizo particularmente vulnerables a robos. Según Ellison, el costo total de las reparaciones podría superar los 500 millones de dólares.
Como parte del pacto, Hyundai y Kia se comprometieron a instalar sin costo una solución técnica en todos los vehículos elegibles, fabricados entre los años 2011 y 2022. En total, se estima que cerca de nueve millones de unidades fueron vendidas a nivel nacional y podrían beneficiarse de esta medida.
Además, las compañías deberán incorporar de forma obligatoria un inmovilizador de motor —una tecnología clave para prevenir robos— en todos los vehículos que vendan en Estados Unidos a partir de ahora. También acordaron pagar hasta 4.5 millones de dólares en restitución a propietarios cuyos vehículos resultaron dañados durante robos.
El acuerdo fue firmado por 35 estados, entre ellos California, Nueva York, Nueva Jersey y Pensilvania. La investigación se intensificó tras el aumento masivo de robos de vehículos Hyundai y Kia, impulsado en parte por videos difundidos en redes sociales como TikTok, donde se mostraba cómo sustraer estos autos utilizando herramientas simples, como un destornillador y un cable USB.
En ciudades como Minneapolis, los robos de estos modelos aumentaron hasta un 836 % entre 2021 y 2022. Las autoridades señalaron que, aunque los mismos fabricantes sí incluían inmovilizadores en vehículos vendidos en Canadá y México, esta protección no fue incorporada de manera generalizada en Estados Unidos.
“Esta crisis comenzó en una sala de juntas, se propagó por internet y terminó en consecuencias trágicas”, expresó Ellison, al recordar casos de accidentes fatales vinculados a vehículos robados, incluyendo víctimas jóvenes.
La reparación consistirá en la instalación de una funda de zinc que refuerza el cilindro de encendido, dificultando su manipulación por parte de ladrones. Los propietarios tendrán un plazo de un año, a partir del aviso oficial de las compañías, para acudir a un concesionario autorizado y recibir la reparación sin costo. Se espera que el proceso se extienda desde principios de 2026 hasta inicios de 2027.
En un comunicado, Kia aseguró que el acuerdo reafirma su compromiso con la seguridad de sus clientes y con la cooperación junto a las autoridades para combatir el robo de vehículos, así como el impacto negativo de las redes sociales en este fenómeno delictivo.



