Santo Domingo. El Frente Amplio de Lucha Popular (FALPO) anunció el inicio de una campaña nacional en demanda de que el Gobierno disponga la inversión de un 5% del Producto Interno Bruto (PIB) en Salud, que permita solucionar los graves problemas que afectan los hospitales y centros de salud públicos del país y que les impiden ofrecer la atención y servicios que demanda la población de más escasos recursos.

Falpo



Raúl Monegro, vocero nacional del FALPO, informó que un piquete a realizarse a las 10:00 de la mañana del miércoles, 22 de octubre, en el Ministerio de Salud Pública en esta capital, marcará el inicio de la lucha por una justa inversión del gobierno en Salud y para que el Estado garantice Seguridad Social al pueblo dominicano, donde se proponen entregar un documento a la nueva ministra, la Dra. Altagracia Guzmán Marcelino.

Indicó en un comunicado enviado a la prensa que la manifestación del próximo miércoles frente al Ministerio de Salud Pública es coordinada conjuntamente por el FALPO, el Frente Estudiantil de Liberación Amín Abel (FELABEL) y la Izquierda Revolucionaria (IR).



Para el dirigente popular, las muertes en el hospital Robert Read Cabral “tiene un solo culpable: el gobierno del Partido de la Liberación Dominicana (PLD)”, tras señalar que la inversión en Salud es de tan solo 1.2% del Producto Interno Bruto (PIB), una de las más baja de Latinoamérica.

Monegro sostuvo que, acusar a los médicos de negligencia por la muerte de los 11 niños en el hospital Robert Read, “es irse por la rama”, y afirmó que “lo único bueno con que cuentan los centros de salud pública son los médicos y el personal de enfermería”.

Dijo que el único responsable de las perdidas de vida en los centros de salud es el gobierno de Danilo Medina, por haber abandonado los hospitales públicos a su suerte, por lo que demandó que la partida presupuestal sea elevada a $100 mil millones en el Presupuesto de 2015.

“Los hospitales de ‘Autogestión’, cuyos servicios y atención tienen un costo imposible para los dominicanos pobres, reciben un total de $2,644 millones al año, en tanto que 1,700 hospitales y policlínicas del sector público, se les asigna $847 millones anual, de cuyo monto les llega menos del 50 porciento.

Calificó de absurda la política de distribución de los recursos en Salud, al indicar que a hospitales dirigidos por patronatos, como el “Marcelino Vélez Santana”, la Plaza de la Salud y el “Ney Arias Lora”, $44, $26 y $20 millones mensuales, respectivamente, y en cambio, a los centros de salud públicos, como el hospital infantil “Robert Read” le asignan $7 millones mensuales, el hospital Infantil “Arturo Grullón”, de Santiago, $7 millones al mes y al Moscoso Puello, tan solo $5.5 millones por mes, parte de los cuales son desviados a Promese, por concepto de medicamentos.

Monegro consideró que la crisis en los hospitales es grave y no se resuelve con simple cambios de directores o del ministro de Salud.

“En República Dominicana los hospitales necesitan ser equipados y abastecidos de medicamentos. El más sencillo estudio o exámen de laboratorio hay que hacerlos fuera y hasta una jeringuilla hay que salir a comprarla. Tenemos un sistema de Salud colapsado y un plan de retiro que es un fraude. El pueblo dominicano carece de seguridad social”, sostuvo Monegro.

El vocero nacional del FALPO afirmó que, además de que el PLD tener el Estado secuestrado y de no existir un libre ejercicio de la democracia y la participación política, con la formulación del nuevo presupuesto, sin tomar en cuenta el clamor y necesidades de los distintos sectores, el gobierno de Danilo Medina ha implantado en el país “una dictadura fiscal y económica”.

El dirigente popular abogó por un 5% del Producto Interno Bruto (PIB) como inversión mínima del Estado en Salud Publica, al considerar que la partida de RD$60,949 millones, consignada en el Presupuesto Nacional de 2015 para el sector, resulta insuficiente, ya que de esa suma, RD$22,244 corresponden a transferencias a SENASA, INAPA, la CAASD, entre otras instituciones, y que solo una ínfima parte llega a los hospitales públicos para atender a los pacientes.