El rodaje de la octava entrega de la saga Rápidos y furiososatraviesa serios problemas, luego de la renuncia del director James Wan, pese a que Universal Pictures le ofreció una gran suma de dinero para renovarle el contrato.
Se supo que Wan desistió de la idea de dirigir la película debido a diferencias con el protagonista y productor de la saga, el actor Vin Diesel. Asimismo, tuvo serios problemas de salud.
“Aparte del trauma que hubo por la muerte del actor Paul Walker,Wan tuvo un trato difícil con Diesel. Se dice que, como productor, cuestionaba cada detalle acerca de las elaboradas escenas de acción, lo que a veces entorpeció la compleja producción. Además, es conocido por llamar a los directores para que tengan largas sesiones nocturnas que lo hagan sentirse cómodo con su personaje”, informó un allegado a The Hollywood Reporter.
Debido a estos retrasos, la próxima entrega de la saga Rápidos y furiosos recién se estrenará en un par de años.
Fuente: Peru21
