Flérida Mauricio Castillo comparte su frustración con nosotros en el siguiente desahogo.

Respetado Medio de Socorro, digo, de Comunicación:



De acuerdo a lo citado en el Art. 18, de nuestra recién estrenada constitución, debo suponer que soy DOMINICANA, y que por lo tanto me corresponde disfrutar y cumplir con todo lo que este calificativo demanda.

Me dirijo a ustedes (medios de comunicación) porque se han convertido en el oasis y refugio de la población sencilla, y dependiente solo de Dios. Hoy me siento impotente y por demás discriminada, ya que como joven preocupada por su futuro y su país, he dedicado muchos años y sacrificios para prepararme en todas las áreas que mis circunstancias me han permitido, con el fin de fabricarme un futuro y brindar lo mejor de mi a esta nación, MI NACION.



Soy, a propósito de lo antes señalado, una ciudadana que al día cumple con todos sus deberes y responsabilidades sociales y cívicas. A pocos meses de finalizar mi carrera universitaria como Contadora Pública Autorizada, decidí activamente lanzarme a distribuir por diferentes entidades, tanto públicas como privadas, mi Curriculum Vitae, con la seguridad que brinda el saberse competente para enfrentar el tan estrecho mercado laboral de nuestra isla.

Grande fue mi sorpresa e inmensa mi tristeza cuando al dirigirme a dos instituciones PUBLICAS (Ministerio de Agricultura y Pro-Industria), a las cuales ayudo a sostener a través de los gravísimos impuestos que el estado me exige pagar, y las que irónicamente ostentan el nombre de MINISTERIOS, me advirtieron no tomarían en cuenta mis hojas de vida, por el hecho de no haber presentado CARTA POLITICA DEL PARTIDO DE GOBIERNO, desconcertada por lo que había escuchado tuve que dar media vuelta y retirarme curriculum en mano.

No pertenezco a las filas de NINGUN partido político, lo que digo con sumo orgullo, y el mensaje que como joven DOMINICANA recibí tras este tan indignante suceso es que, no importa cuanto me esfuerce, cuanto trate de edificarme personal y profesionalmente, ya que aún el más ignorante polítiquero gozará de los beneficios que a esta empeñada ciudadana le serán negados.

Quisiera poder gritar a todo pulmón la decepción patriótica que en este instante me invade, pero me conformare con vergonzosamente denunciar esta tan abusiva e injusta realidad que corroe mi país y debilita las esperanzas de tantos años en la búsqueda de un mejor futuro,

Esperando sus oídos no se ensordezcan y su voz no se debilite, ayudándome a gritar con las fuerzas que a mis pulmones les faltan,

Flérida Mauricio

DOMINICANA,