Un menor de 10 años, supuestamente sorprendido el pasado viernes cometiendo actos delictivos por encomienda de algunos adultos, permaneció 5 días esposado a uno de los bancos del destacamento de policial de Cotuí, acto del cual se desligaron las autoridades judiciales del municipio.
El magistrado Jacinto de Jesús Mendoza, dijo en El Gobierno de la Tarde de la z 101, que el acto de esposar un niño de 10 años durante cinco días fue responsabilidad de un coronel de la Policía Nacional de puesto en el destacamento local, quien rehusó obedecer la orden de poner al menor de edad en libertad.
El funcionario de la justicia de Cotuí, dijo que el menor intentó fugarse en dos ocasiones, lo que habría inducido al oficial policial a tomar la decisión de esposarlo por un pié a uno de los bancos de la recepción del cuartel. “Pero llamé al coronel y le ordené quitar las esposas al niño”.
Contrario a la versión del fiscal Mendoza, el comunicador y dirigente dirigente comunitario, Tereso Arias, llamó a El Gobierno de la Tarde para asegurar que ayer fue al destacamento y se percató de que efectivamente allí se tenía a un niño esposado, por lo que llamó la atención de las autoridades en el sentido de que la acción era ilegal y violatoria de los derechos del menor, además de que procedió a tomar fotografías que esta tarde facilitó a este portal.
El fiscal dice que el menor no duró cinco días esposado, pero Arias confirma que los policías le confirmaron esa información, indicando que tomaron la decisión ante la negativa del fiscal para recibir al menor en sus oficinas, a la vez que amenazó con «trancarlo» si lo llevaban a la Fiscalía.
Después que Tereso tomó las imágenes del abuso, el coronel trasladó el niño hasta la oficina del fiscal y de allí lo enviaron a las oficinas locales del Consejo Nacional para la Niñez (CONANI).
El fiscal Mendoza alega que no lo había trasladado a la capital porque el menor reusaba dar los nombres de sus parientes, además de que los adultos que fueron apresados junto a él se negaban también a colaborar con la justicia.
Fuente: Comederoarriba.com