BRUSELAS. Los países de la Unión Europea (UE) decidieron este lunes un embargo gradual a las exportaciones de petróleo de Irán y una congelación de los activos del Banco Central, para forzar a Teherán a frenar el desarrollo de su programa nuclear.

«Se llegó a un acuerdo de principio para imponer un embargo petrolero a Irán», dijo una fuente diplomática. El acuerdo será aprobado formalmente este lunes por los ministros de Relaciones Exteriores de los Veinisiete de la UE, reunidos en Bruselas.



Los jefes de la diplomacia europea decidieron además sanciones contra 22 militares en Siria, que se añaden a una lista negra de personas y empresas de ese país a las que se les congelan los haberes y se niegan los visados a Europa, por la cruenta represión del régimen de Bashar al Asad contra la oposición.

El texto del acuerdo prohíbe inmediatamente a los países europeos establecer nuevos contratos en el sector petrolero con Irán, segundo productor de la OPEP después de Arabia Saudita, en castigo por su programa nuclear que, según los occidentales, tiene como objetivo la bomba atómica.



Prevé además una fase de transición para la anulación de los contratos existentes, que entrará en vigor el 1 de julio próximo, para dar a los países europeos más dependientes del crudo iraní, entre ellos España, Italia y Grecia, tiempo para encontrar alternativas a la importación de crudo.

En las últimas horas los dirigentes europeos aceleraron las negociaciones para convencer a Grecia, que pide que las sanciones entren en vigor en el plazo de un año, ofreciéndole garantías de que su maltrecha econonomía no se verá afectada.

Sobre todo porque Grecia es el país europeo con mayor dependencia del crudo iraní, ya que la república islámica no le exige garantías financieras a cambio.

España e Italia dieron su apoyo a la entrada en vigor de las sanciones en seis meses, aunque dejaron en claro que realizan un «sacrificio».

«España es uno de los países que más se va a sacrificar. Entendemos que la seguridad de la zona es prioritaria, por tanto estamos dispuestos a hacer este sacrificio para conseguir la unanimidad en Europa», dijo a su llegada a Bruselas el ministro José Manuel García-Margallo.

Teherán vende unos 450.000 barriles diarios (cerca del 20% de sus exportaciones) a la Unión Europea, esencialmente a Italia (180.000 bd), a España (160.000 bd) y a Grecia (100.000 bd).

Varios dirigentes occidentales afirmaron en las últimas semanas que algunos países del Golfo, sobre todo Arabia Saudita, que produce actualmente 10 millones de barriles diarios (mbd), reemplazarían al petróleo iraní.

Pero la oferta generó la furia de Irán. Si esos países reemplazan el petróleo iraní, «serán los principales responsables de lo que sucederá», advirtió.

Ante la amenaza de sanciones de Estados Unidos y Europa, Teherán ha ido suavizando su respuesta: primero dijo que responderá cerrando el estrecho de Ormuz, por donde transita el 35% del tráfico petrolero marítimo mundial, pero se retractó tras la advertencia de Washington de que «está preparado» y reaccionará si bloquea ese canal.

Pese a las sanciones, los Veintisiete volverán a ofrecer a Teherán la posibilidad de reanudar el diálogo. La Unión Europea dijo el viernes que espera una «reacción» de Teherán a su última oferta de negociaciones, que se remonta a octubre.

En nombre del grupo de los «5+1» (Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Gran Bretaña y Alemania), la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, escribió el 21 de octubre una carta a Irán, para reanudar las negociaciones.

Los Veintisiete también prevén ratificar este lunes el acuerdo ya alcanzado a nivel de embajadores para ampliar las sanciones contra el régimen sirio. Al menos 22 personas y ocho empresas se añadieron a una lista, dijo un diplomático que pidió el anonimato.

AFP