Santo Domingo. «Durante el próximo fin de semana largo, el país tendrá la mayor salida programada de generación eléctrica en los últimos 10 años, porque se dejarán de producir 550 megavatios», anunció ayer el vicepresidente ejecutivo de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), Celso Marranzini.

Asimismo, el funcionario dijo que por motivos de mantenimiento se detendrá la generación de las unidades Los Mina V y Los Mina VI, que producen 250 megavatios y que esto se suma a que AES Andrés, que genera 300 megas, está fuera de servicio desde el 17 de este mes.



“Decir que va a haber más a apagones o no, nosotros esperamos que no. De hecho, nosotros hemos tenido la unidad de Andrés, la mayor en capacidad, fuera del sistema y eso no ha causado ningún tipo de inconveniente. Indudablemente estamos sacando 250 megas más, esa es la salida mayor programada en 10 años que ha tenido el sistema y eso lo que hay es que trabajar de la mano, de común acuerdo entre todos”.

Esta caída en la generación, según Marranzini, no necesariamente originará apagones, porque entrarán en funciones Haina IV y la turbogas de Haina y las hidroeléctricas están disponibles para generar energía 24 horas. Pidió, sin embargo, comprensión a los usuarios y usuarias del sistema eléctrico y dijo que se aprovechó la ocasión del fin de semana de tres días, porque está demostrado que en este tipo de fin de semana el consumo cae. El mantenimiento empieza el viernes 27 y termina el martes 31 de este mes.



Aspecto técnico de la salida

Jesús Bolinaga, presidente de AES Dominicana, explicó las razones por las que salió de operación la planta Andrés.

“Lo que estamos haciendo -dijo- es construir un tercer tren de extracción de gas del tanque. Es decir, tiene dos, vamos a poner un tercer tren que nos permita extraer más gas del tanque, regasificar ese gas y poderselo ofrecer a la planta de Andrés, a las plantas de Los Mina y Los Mina VI y también atender las demandas de los industriales”.

Con eso, según Bolinaga, estarían garantizando una inversión de alrededor de 8 millones de dólares, estarían garantizando la demanda a futuro de gas y de energía eléctrica que tenga el país.