CHICAGO.  La petrolera británica BP alcanzó un acuerdo por 7.800 millones de dólares para terminar con demandas de pescadores y otros particulares afectados por el derrame de crudo en el Golfo de México, antes del inicio del juicio en Estados Unidos, informó la firma el viernes por la noche.

El acuerdo no afecta lo que se anticipa serán decenas de miles de millones de dólares en multas y demandas de parte del gobierno estadounidense y las administraciones locales afectadas por el derrame.



El trato tampoco resuelve las demandas iniciadas por accionistas o por particulares que busquen una compensación debido al cese de las perforaciones impuesto tras el peor desastre ambiental de la historia de Estados Unidos.

Sin embargo, este convenio entre las partes supone un avance en una complicada batalla legal.



«El acuerdo propuesto representa un progreso importante hacia la resolución de asuntos como el accidente de (la plataforma) Deepwater Horizon y contribuyendo hacia mayores esfuerzos para una restauración económica y ambiental en la costa del Golfo», afirmó el presidente ejecutivo de BP, Bob Dudley, en un comunicado.

Este acuerdo de último minuto implica que el esperado juicio será retrasado nuevamente tras un aplazamiento de una semana ordenado el domingo para dar espacio a las negociaciones.

El juez Carl Barbier emitió una orden el viernes para levantar el caso de forma indefinida «ya que un acuerdo de este tipo probablemente implique un reposicionamiento de las partes en conflicto y requiere realizar cambios sustanciales a la primera fase del juicio y permitir que las partes replanteen sus respectivas posiciones», sostuvo.

Es probable que el caso vaya a juicio de todas formas, incluso aunque BP llegue a un acuerdo con el gobierno federal.

Esto se debe a que el gigante petrolero británico busca que empresas subcontratistas asuman algunos de los costos del accidente, una cuestión compleja desde el punto de vista legal que probablemente implique años de procedimientos y múltiples apelaciones de por medio.

Barbier, un experto en Derecho Marítimo que asumió cientos de demandas relacionadas con el derrame de crudo, ha dejado la puerta abierta en sesiones claves previas al juicio a la responsabilidad compartida.

Varias investigaciones gubernamentales ya han responsabilizado a las encargadas de las operaciones de perforación de BP, Transocean y Halliburton, por la cimentación defectuosa de la plataforma y por la falta de señales de advertencia que pudieran impedir el desastre ambiental.

La plataforma Deepwater Horizon, que trabajaba para BP, explotó en abril de 2010 causando la peor catástrofe ecológica en la historia de Estados Unidos.

Fueron necesarios 87 días para controlar el derrame sufrido en la plataforma de BP en el Golfo de México, que arrojó cerca de 4,6 millones de barriles de petróleo a sus aguas.

AFP