Santo Domingo. Amé 47, desde 1995 viene ofreciendo una programación refrescante en la televisión dominicana, con una propuesta variada, enriquecida por series de televisión que complementan su equilibrada parrilla de contenido local.



Uno de sus programas lanzado este verano es el matutino “Espresso 47”, diseñado para que el público disfrute en vivo de las actualidades del día en horario de lunes a viernes de 7:00 a 8:30 de la mañana.

Sus conductores lo definen como una revista informativa, de entretenimiento y actualidad que lleva información de primera mano cada mañana, bajo una producción local.



Conducido por Khaissy Cruz, Arisa Vargas, Daniel Batista y Taiana Filpo, “Espresso 47”, se vislumbra como la principal opción mañanera para estar informado y entretenido de una manera refrescante, que motive el inicio del día con entusiasmo.

“Queremos ser los compañeros de la gente mientras se alista para ir al trabajo o llevar los niños al colegio, llenando con energía positiva su día por medio de un entretenimiento sano”, expresan sus conductores.

“Espresso 47”, está estructurado por los segmentos “Hilo y Dedal” (moda), “Esqueleto” (ejercicios), “Confieso” (Entrevistas), “Platos y Cubiertos” (Gastronomía), “En el Lente” (Noticias de espectáculo), “Noticias” en el ámbito nacional, económico y política, Deportes; “Vitamina E” ( Salud) , “Pop Corn” (Cine) y “A Ritmo” (Reportajes).

La reaización de este  espacio recae sobre los hombros de Oscar García, quien tiene en la producción de televisión, radio y espectáculos, más de cinco años, aquilatando una experiencia de calidad. Igualmente cuenta con la asistencia de Heily Filpo.

Con esta propuesta Ame 47, ratifica su contacto permanente con la juventud siendo un canal enfocado a este segmento de público desde sus inicios, donde mantiene su liderazgo por su variedad de contenido.

“Espresso 47, busca dejar una enseñanza en cada entrega, conquistar los hogares dominicanos y buscar un público que se identifique con el espacio” finaliza diciendo su productor Oscar García.

Por Alfredo García