La mejor forma que ha encontrado Hugo Chávez para demostrar que puede gobernar otros seis años más –del 2013 al 2019, hasta completar 20–, sin mostrar rastros del cáncer que lo llevó a Cuba en repetidas ocasiones, es que él mismo cante, grite y toque guitarra frente a concentraciones chavistas emocionadas, como si fuera una estrella de rock.



“Está escrito, ¡gana Chávez el 7 de octubre!”, autoproclama el teniente coronel retirado, quien entró al Palacio de Miraflores en 1999 y no quiere que la oposición ponga pie en él.

“Los venezolanos no solo están eligiendo a su presidente, sino a un líder regional”, asegurá a Publimetro Ronald Rodríguez, analista político del Observatorio de Venezuela, que explicó que realmente Chávez está aspirando a una segunda reelección y no a una tercera.



“Ha pasado por cuatro procesos electorales directos. Fue elegido en 1998 por primera vez, cambió la Constitución y el 2000 se ratificó como presidente. Bajo las nuevas reglas se presentó el 2006, ganó, y ahora busca ampliar seis años más su poder, pero no se sabe si podrá cumplirlo por su estado de salud”, agregá Rodríguez.

Para Mauricio Jaramillo, experto en seguridad política en la región andina de la Universidad del Rosario (Colombia), *la figura de Chávez representa ahora
“a un personaje socialista mucho más maduro*, que propone un modelo que se adapta a las leyes del mercado y hasta a la democracia liberal”.

Chávez ha intentado reafirmar el cariño de sus seguidores y conquistar el de los indecisos con elementos que la alta política pasa por alto: “El hecho de tener un color rojo que lo identifica, de trabajar en barrios desfavorecidos, de tener un discurso en un lenguaje que habla la gente, de cantar, de ser amigo de figuras alternativas como Silvio Rodríguez y Maradona, entro otros. Todo eso para una gran parte de la población es importante”, explicá Jaramillo.

 

Fuente: Publimetro Colombia