SÏDNEY. Una estudiante brasileña de 20 años vendió su virginidad por 780.000 dólares en una subasta en internet a un japonés, anunció el jueves el promotor de la controvertida operación.



Catarina Migliorini, que confió a la prensa brasileña que quería financiar sus estudios de medicina en Argentina, despertó el interés de 15 personas oriundas de India, Estados Unidos, Brasil y Japón.

Un joven ruso de 21 años, Alexander, ofrecía igualmente su virginidad: una brasileña ganó la puja por sólo 3.000 dólares.



«Las subastas de vírgenes en Australia están terminadas» desde el miércoles, anunció el jueves la página internet virginswanted.com.au que publica fotos de «Catarina» y «Alexander» con la mención «vendidos».

Según la prensa australiana, Catarina Migliorini será «entregada» a su comprador a bordo de un avión con destino a Australia, y luego la pareja «consumará» en las próximas semanas en un lugar que permanece en secreto.

«Catarina está extremadamente contenta. Habló con sus allegados en Brasil y estaban muy contentos por ella», explicó el organizador australiano Jason Sisely que organizó esta venta para un documental.

«Veo esto como una empresa», justificó la joven a la prensa británica. «Esto permite viajar, rodar un film y ganar dinero», añadió.

«Si hace esto una sola vez en su vida, una no es una prostituta. No es porque saca una foto extraordinaria que hace de usted un fotógrafo», dijo.

El contrato entre Catarina y el comprador de su virginidad, identificado como «Natsu», estipula que este último deberá utilizar un preservativo y deberá someterse a exámenes médicos para saber si está afectado con enfermedades transmisibles sexualmente, precisó Jason Sisely, citado por el diario en internet Ninemsn.

AFP