El presidente Danilo Medina recibió ayer en su despacho, a una delegación de los campeones del Clásico Mundial de Béisbol, quienes le mostraron el trofeo ganado por el equipo y las dos medallas que obtuvieron los jugadores

Danilo Medina



Campeones Clasico Mundial

Robinson Canó, ganador del premio al jugador más valioso, MVP, del Clásico representó a sus compañeros durante el encuentro, al que la delegación llegó al Palacio Nacional en compañía del ministro de Deportes Jaime David Fernández Mirabal.
También asistieron el presidente de la Federación Dominicana de Beisbol Héctor –Tito- Pereyra; Moisés Alou, gerente general de la Selección, Juan Núñez, secretario general, y José Canó padre del destacado pelotero, así como otros miembros de la Federación.



El intermedista Canó agradeció la deferencia del presidente Danilo Medina al recibir la comisión en su despacho, un encuentro caracterizado por la cordialidad, escenario que fue utilizado para juntos posar para las cámaras, mientras compartían anécdotas ocurridas en los campos de juego del Clásico.

Canó tuvo una brillante participación en el Mundial, tanto a la ofensiva como a la defensiva del conjunto campeón. Recibió su premio con humildad, asegurando que alcanzar ese galardón no se logra solo, cuando afirmó: “El verdadero MVP es el equipo”.

La ocasión también fue aprovechada por periodistas del área de deportes para preguntarle al Mandatario, en torno a la posibilidad de celebrar en el país el Clásico Mundial de Béisbol 2017. El presidente Danilo Medina respondió que deben consultar a los partidos políticos y a las autoridades que estarán a partir de la fecha, porque él “no puede comprometer el futuro de otro gobierno”.

El conjunto dominicano ganó los ocho partidos que disputó en la tercera edición del Clásico Mundial de Béisbol, con lo que hizo historia al convertirse en el primer equipo que logra invicto esta competencia.

Con este triunfo, República Dominicana también se coronó como nuevo Campeón Mundial de la Federación Internacional de Béisbol (IBAF por sus siglas en inglés), título que el país no obtenía desde el Campeonato Mundial de 1948, celebrado en Nicaragua.