KABUL. Los talibanes afganos prometieron este jueves que se vengarán de las fuerzas estadounidenses en Afganistán por los «abusos» cometidos recientemente contra los detenidos de la prisión de Guatánamo.

«Los muyahidines (combatientes) se comprometen a vengar a los presos víctimas de abusos, atacando a los invasores estadounidenses en Afganistán con toda la fuerza de la que disponemos», afirmó su portavoz, Zabiullah Mudjahid.



Las organizaciones humanitarias deben condenar «este tipo de acciones cobardes de Estados Unidos y tomar posición contra ellas basándose en los derechos humanos evidentes», añadió.

Unos 52 detenidos, de los 166 prisioneros de Guantánamo, llevan adelante desde el 6 de febrero una huelga de hambre. Quince de ellos estaban siendo alimentados por la fuerza.



Según los abogados, un centenar de los detenidos más conciliadores participan en el movimiento, que se desencadenó tras una inspección rutinaria en la que los presos se quejaron de que los guardias habían profanado sus libros del Corán.

Pero, según sus defensores, la causa también es su detención ilimitada desde hace once años sin inculpación ni proceso.

Un informe independiente de la organización Constitution Project condenó «la alimentación forzada» de los prisioneros de Guatánamo, estimando que se trata «de una forma de abuso que hay que detener».

El sábado, unos sesenta detenidos fueron transferidos a células individuales luego de una revuelta que llevó a las autoridades a tirar balas no letales.

AFP