mujer sola

 

Ellas dicen que todos los hombres están comprometidos o son gays y ellos dicen que todas las mujeres son unas interesadas o fáciles… pero ambos están equivocados: encontrar pareja depende de uno mismo, no de los demás.



Los expertos aseguran que la gente comete una y otra vez los mismos errores a la hora de buscar su media naranja. Uno de los principales es pedir imposibles.

“Con el paso de los años las personas se hacen más exigentes, eso es algo normal. El problema viene cuando se salen de la realidad y están esperando que llegue alguien que no existe”, asegura la psicóloga Kathie López.



Para el psicólogo conductual Galo Guerra, lo que se pide, muchas veces, no va de acuerdo con lo que se ofrece.

“Por ejemplo, si se entra a una posible relación ‘vendiéndose’ como el que paga todo, lo que van a ver en usted es un apoyo económico y no una pareja”, señala.

La consejera Kathia Morales, de Enfoque a la Familia, reconoce que hay algo de “suerte”: algunas personas logran encontrar una media naranja que los acepte con todos los defectos imaginables, pero son la minoría.

“Es necesario comportarse como un adulto, saber lo que quiere, dejar de escoger personas problemáticas, tomar una actitud positiva y, sobre todo, no obsesionarse por tener pareja. Primero tenga un proyecto de vida”, asegura.

Así que, antes de salir a buscar pareja, corrija lo que está haciendo mal, de seguro tendrá éxito.

Errores frecuentes

1 Rechaza a todas las personas que no son “perfectas”, es decir, que no se ajustan a sus exigencias, las cuales son casi imposibles de encontrar.

2 No se mueve. Prefiere quedarse viendo televisión con tal de no arreglarse para salir.

3 Anda perdido. Busca en lugares equivocados, por ejemplo: Si es una persona casera, ¡jamás busque pareja en un bar!

4 Motivo erróneo: Creer que su realización depende de tener a alguien con quien estar.

5 Es inseguro. Teme que se repitan sus malas experiencias.

6 Cara de boda. Cada vez que conoce a alguien lo ve con cara de esposo o esposa. El otro percibe su ansiedad.

7 No se le entiende. Dice las cosas al revés de como las piensa y la gente se equivoca con usted.

8 Solo “peros”. Se justifica diciendo que tiene mucho trabajo, que su vida es muy complicada, que nadie lo comprende, ¡el mundo se cae frente a usted!

9 Es “acomodado”. Vive con sus papás después de los 30 años para no asumir riesgos.

10 Es poco claro. Ofrece una relación casual cuando se muere por casarse.


Fuentehttps://www.alteregoonline.com