Santo Domingo. Los ejecutivos de la subsidiaria en República Dominicana de la minera canadiense Falconbridge, que anunció la semana pasada el cierre temporal de sus operaciones en la provincia Monseñor Nouel (norte), dijeron hoy que se esforzarán para que este cese dure el menor tiempo posible.

Ejecutivos Falcondo



Tras reunirse con el presidente del país, Danilo Medina, el presidente de la minera, Darren Bowden, dijo en declaraciones a la prensa que la empresa «hará todos los esfuerzos para que el tiempo que perdure la parada sea el menor posible y de esa manera contribuir al desarrollo del país y del pueblo de Bonao».

Los ejecutivos de la minera también expresaron su interés de que la relación que han mantenido por cuatro décadas con el Estado dominicano «continúe por muchos años más».



A la reunión también asintió el senador Félix Nova, representante de la provincia Monseñor Nouel, donde se ubica Bonao, quien dijo que le pidió a Medina auxiliar a los trabajadores afectados por el cese.

«Le pedí que vaya en auxilio de los trabajadores y de una buena parte de la población que va a salir muy afectada con todo el tema del cese de las operaciones» de Falconbridge Dominicana (Falcondo).

El legislador dijo que Medina comparte su «preocupación» por la repercusión que tendrá en la provincia la decisión de esta empresa.

«El presidente se mostró muy interesado en hacer todo lo posible por auxiliar a esas familias», afirmó Nova, del oficialista Partido de la Liberación Dominicana (PLD).

La decisión de Falcondo fue anunciada el pasado 2 de octubre, un día después de que la Cámara de Diputados local declarara como parque nacional una montaña del centro del país, que la minera pretendía explotar para ampliar sus operaciones, aunque la firma dijo que esa medida nada tenía que ver con el cierre.

Ejecutivos de la empresa canadiense informaron que los deprimidos precios internacionales del níquel eran la causa de la paralización, que afectará a casi 1.000 empleos directos y otros 10.000 indirectos.

Falconbridge explicó que el níquel se cotiza a unos 6,0 dólares la libra, lo que hace «imposible» la rentabilidad de su explotación.

«El desplome de los precios del níquel en los mercados internacionales y los altos precios del petróleo nos llevan a que hagamos un alto y demos inicio al proceso de readecuación y reestructuración de la empresa», dijo entonces el director de comunicaciones de la empresa, Alain Astacio.

Precisó que en 2012 la empresa perdió unos 17 millones de dólares y que en 2013 las pérdidas son aún mayores.

De acuerdo a su previsión, Falconbridge podría volver a operar en unos 2 ó 3 años, siempre y cuando las condiciones lo permitan.

No es la primera vez que Falconbridge paraliza sus trabajos en el país, la última de estas fue en 2008, cuando también alegó una caída en los precios del níquel. La reapertura de sus explotaciones se produjo hace algo más de dos años. EFE