La lesión que sufre el campocorto dominicano Hanley Ramírez se ha convertido en un auténtico dilema para los Dodgers de Los Ángeles, que no saben si podrán contar con él para el tercer partido de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional que disputan contra los Cardenales de San Luis y pierden por 0-2 al mejor de siete.

Hanley Ramirez



Hanley recibió un pelotazo en el costado derecho que le generó un desgarro en las costillas durante el primer partido de la serie disputado en el Busch Stadium, de San Luis, y no pudo disputar el segundo.

El relevista Joe Kelly, de los Cardenales, fue el que hizo el lanzamiento a dentro y alcanzó a Ramírez, que no pudo evitar el pelotazo.



Aunque el jugador aseguró a los periodistas la tarde del domingo que estaba listo para jugar hoy , el tercer partido, los preparadores del equipo no lo tienen tan claro y es duda hasta último momento.

Hanley reconoció que todavía tiene dolor, que apenas pudo dormir por la noche, pero que su objetivo es ayudar el lunes al equipo.

Los Dodgers esperan que tenga razón porque saben que su presencia en el campo es fundamental en el apartado de la ofensiva del equipo, que hasta ahora ha sido silenciada por los lanzadores de los Cardenales.

Es la decisión más importante de la temporada para los Dodgers porque saben que una derrota en el primer partido de los tres que tienen que disputar en su campo sería ponerse al borde del abismo.

«Voy a hacer todo lo que sea necesario para estar en el lineup y salir al terreno en frente de nuestros fanáticos para así intentar ganar», declaró Ramírez. «Aunque haya alguna ruptura, voy a tratar de salir si podemos eliminar el dolor. Estamos trabajando en ello para que pueda jugar».

Sin embargo, Ramírez también reconoció que el sábado y domingo no pudo hacerle swing al bate ni levantar al completo el brazo derecho.

«Hay ciertas cosas que le impedirían poder jugar. Sin importar cuánto Hanley desee jugar, habrán limitaciones que le costarán participar. Deberá ser capaz de hacerle swing al bate», declaró Don Mattingly, piloto de los Dodgers. «No podemos arriesgar con un jugador que tenga limitaciones en su condición física».

El jugador considera que el tratamiento que ha recibido y el esfuerzo que están poniendo todos debe ayudarle a estar mejor el lunes cuando llegue la hora del partido.

«Tendremos un día más que podría hacer la diferencia», comentó Ramírez. «Le estoy aplicando hielo a la parte lesionada cada 20 minutos».

Ramírez admitió que la lesión es una de las más fuertes que ha tenido como profesional ya que no pude descansar bien debido a las molestias que siente.

«Cuando estoy durmiendo, aún siento molestias. Aún cuando me levanto o hago cualquier cosa, la percibo. No se siente nada bien al hacer cualquier movimiento», comentó Ramírez. «Si el partido se hubiese tenido que jugar el domingo con toda seguridad no hubiera podido salir al campo».

Ramírez mostró también su «realismo» al destacar que las cosas suceden por algo y lo importante de es que se trabaja para la recuperación.

«Trato de superarlo y de salir adelante. Ahora que esto ocurrió, tenemos que aplicar el tratamiento para la lesión, intentar mejorarse y regresar al terreno», señaló Ramírez. «Cuando me despierte y durante el día, viendo como me puedo mover será lo que nos marque lo que pueda hacer en el campo».

Ramírez, de 29 años, tiene previsto llegar temprano al campo y hacer práctica de bateo el tiempo suficiente que le permita comprobar con exactitud su estado físico.EFE