WASHINGTON. Uno de los cuatro bomberos estadounidenses, que resultaron heridos hace un mes cuando ayudaban a estudiantes a realizar un «Ice Bucket Challenge» -un popular desafío con fines caritativos-, falleció el fin de semana, informó la universidad Campbellsville.

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Tony Grider, un bombero de 41 años del condado de Taylor (Kentucky, centro), murió el sábado, informó la institución al dar su pésame a la familia y al cuerpo de bomberos.

El 21 de agosto, en el campus de la universidad de Campbellsville, los cuatro bomberos instalados en la plataforma elevada de su camión fueron alcanzados por la corriente eléctrica procedente de una línea de alta tensión, mientras ayudaban a un grupo de universitarios a superar el famoso «desafío», mojándolos con agua en un campo deportivo de la universidad.



Dos de ellos quedaron heridos de gravedad y otros dos pudieron bajar de la plataforma para ser brevemente hospitalizados. Uno de los heridos graves salió del hospital la semana pasada, informó el Central Kentucky News-Journal.

El «Ice Bucket Challenge», que se convirtió en fenómeno mundial gracias a las redes sociales, consiste en verterse un balde de agua helada sobre la cabeza o hacer una donación, aunque a menudo se logran ambas cosas, para la asociación ALS, que lucha contra la enfermedad neurodegenerativa de Charcot o de Lou Gehrig.

Muchas celebridades, desde el expresidente estadounidense George W. Bush hasta el cantante canadiense Justin Bieber y el fundador de Microsoft, Bill Gates, se mojaron por esta causa.