Santo Domingo. Glennys Mota estuvo al tris de perder la barriga. En el baño le dio un mareo, «malpisó» y cayó. ¡Mi bebé!, pensó y se preocupó. “Vamos pa’l médico”, le dijo su madre. Sin un chele para el motoconcho, un vecino pronunció la palabra mágica: 911.
Corrieron a llamar al 911. ¿Vendrán hasta aquí, se preguntaron los vecinos?
Poquitos minutos después llegó la ambulancia del 911 con la paramédica Emperatriz Cruz.
Glennys fue trasladada desde La Ciénaga en Santo Domingo Oeste hasta el hospital Marcelino Vélez Santana.
Allí, en el hospital, le dieron “buena atendencia”, recuerda Francisca, la madre. La llevaron a ginecología y luego a ortopedia.
Terminó con la pierna enyesada. ¿Y el bebé? En perfecto estado; ni se enteró de la caída de su madre.
Del 911, a Glennys le gustó que es gratuito. Su madre quedó “asombrada”.