El Gobierno de la Provincia de Buenos Aires analizan pedir la clausura definitiva del Zoo de Luján, un emprendimiento privado, porque permite ingresar a los visitantes a las jaulas de los leones y los tigres de Bengala para que interactúen con ellos.

En redes sociales y en sitios de Internet abundan las fotos de personas que posan con los leones y los tigres.
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“Hay hasta 100 metros de cola en la puerta del sector de los felinos para entrar a tomar fotos y mantener contacto directo”, aseguraron en la Dirección de Flora y Fauna del Ministerio de Asuntos Agrarios de la provincia al diario Clarín.



Las autoridades aseguran que la modalidad colisiona contra una ley provincial (12.238) que regula el funcionamiento de los parques y predios que exhiben animales, porque prohíbe en su artículo 8 “el contacto directo de los animales con el público”. A menos que sean animales inofensivos y domésticos.

Los dueños del Zoo aseguraron que “son animales cachorros que no revisten peligrosidad”. También, “que los animales adultos (tigre y león) se los considera domésticos” y “que los animales cuyo contacto se permite en el Zoo lo hacen bajo técnicas reconocidas por la ciencia etiológica, por lo que los considera mansos”.



Los inspectores de Flora y Fauna se hicieron pasar por visitantes comunes y se fotografiaron con los animales, para documentar lo que ellos consideran que es una clara infracción.