El precio del petróleo cerró este martes con una fuerte baja en Nueva York y Londres, cuando los operadores se preparan para un nuevo aumento de las reservas -ya en niveles récord en Estados Unidos-, y para una recuperación limitada de las cotizaciones.

El barril de «light sweet crude» (WTI) para entrega en marzo cayó 2,84 dólares a 50,02 dólares, en el New York Mercantile Exchange (Nymex).



Petroleo

En Londres, el barril de Brent del Mar del Norte con entrega en marzo cerró a 56,43 dólares en el Intercontinental Exchange (ICE), una caída de 1,91 dólares con respecto a la cotización del lunes.



Tras la lectura del informe mensual de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) sobre las perspectivas a mediano plazo del mercado petrolero, «vemos claramente que el mercado de crudo no regresará al equilibrio en los próximos meses», comentó Kyle Cooper, de IAF Advisors.

En efecto, la agencia estimó que los precios del oro negro se van a recuperar en los próximos años, pero sin volver a los niveles de junio, cuando todavía cotizaban a unos 110 dólares el barril.

Además, la Agencia estadounidense de información sobre la Energía (EAI) mantuvo este martes sin cambios sus previsiones mensuales de producción de petróleo en Estados Unidos. Se espera en 2015 unos 9,3 millones barriles por día (mbd) y 9,5 mbd en 2016, es decir «cerca de su nivel histórico más alto de producción anual observado en 1970 a 9,6 mbd», según el EIA.

La fuerte disminución de la actividad de pozos observada en el país, debido a la disminución de la rentabilidad de la extracción de petróleo en plena caída de precios, se siente apenas.

Paralelamente, «parece que tendremos un nuevo aumento de las reservas de crudo en Estados Unidos» el miércoles, durante la publicación de las cifras semanales del Departamento estadounidense de Energía (DoE), «y esto pesa en el mercado», estimó John Kilduff, de Again Capital.

Los analistas entrevistados por la agencia Bloomberg News apuestan, en promedio, por un aumento de 6,6 millones de barriles en la semana que termina el 6 de febrero.

Con más de 413 millones de barriles, jamás las existencias de oro negro habían sido tan abundantes en Estados Unidos en los últimos 84 años, según cifras del DoE.