Un hombre que manejaba el pequeño dron que terminó estrellado en los jardines de la Casa Blanca el 26 de enero no será procesado, anunció este miércoles la fiscalía del Distrito de Columbia en Washington.

Casa Blanca



El aparato de unos 60 cm de diámetro fue encontrado en los jardines de la residencia presidencial por el Servicio Secreto, el cuerpo élite responsable de la protección del presidente Barack Obama, quien no estaba en el edificio cuando ocurrió el incidente.

La investigación mostró que la persona que dirigía el aparato perdió el control. El hombre, cuyo nombre no fue revelado, se presentó ante el Servicio Secreto, después de ver en los medios que el dron había sido encontrado en la Casa Blanca.



El sujeto explicó que la madrugada de ese día, había volado el «cuadricóptero» de un amigo cerca de su apartamento en Washington y perdió el control cuando este volaba a unos 30 metros de altitud, tras lo cual lo vio desaparecer con dirección oeste.

«Intentó retomar el control pero sin éxito», dijo en un comunicado la oficina del fiscal de Washington, Ronald Machen.

Aunque la fiscalía no iniciará un proceso judicial, la Administración Federal de Aviación (civil, FAA por sus siglas en inglés) seguirá las investigaciones para tomar eventuales medidas administrativas.

Este incidente añadió presión sobre la seguridad de la Casa Blanca encargada al Servicio Secreto, cuya imagen se ha visto deteriorada los últimos años por varios escándalos que involucran alcohol y prostitución así como varios intentos recientes de intrusión en la sede presidencial.