Santo Domingo. Sin descuidar sus labores, Cabral Aquino Encarnación, quien se encarga de dar seguridad en el estacionamiento de la Clínica Real aprovecha los momentos de menor actividad para alfabetizarse.
Con buena actitud y un trato muy afable conversó para Ensegundos.do indicando que tomó la iniciativa de aprender a leer y escribir para cambiar el rumbo de su vida.
“Hay que aprender porque si supiera de letras no estaría pasando tanto trabajo” manifestó en la conversación para este portal.
Sus compañeros de trabajo fueron quienes le motivaron a estudiar inicialmente, recibiendo asistencia de los taxistas y médicos del centro hospitalario.
Aquino Encarnación tiene 33 años y reside en el sector de las Palmas de Herrera, tiene un hijo menor de edad.
Con una mascota y acompañado del libro Nacho ve en el aprendizaje una puerta hacia una mejor vida.
Cuando se quiere se puede.
