Pascal Fauret, uno de los dos pilotos franceses fugado de República Dominicana para eludir una condena por narcotráfico, compareció el miércoles ante los jueces de instrucción a cargo del caso llamado «Air Cocaína».
Los jueces lo interrogarán por primera vez desde su llegada a Francia, anunció a la AFP su abogado, Jean Reinhart.
Su colega Bruno Odos fue interrogado el martes por los mismos jueces de instrucción, que decidieron su detención provisional al cabo del interrogatorio. Fauret podría ser objeto de la misma medida este miércoles.
Estas audiciones son las primeras desde que los dos pilotos huyeron, hace dos semanas, de República Dominicana, donde habían sido condenados en primera instancia a 20 años de cárcel.
En Francia, una información judicial por sospechas de tráfico de droga se abrió por este caso en febrero de 2013. La justicia sospecha que los pilotos y otros dos franceses, Nicolas Pisapia y Alain Castany, también condenados en República Dominicana y que siguen estando en ese país, importaron a Francia cocaína oculta en decenas de maletas cargadas en jet privado.
En República Dominicana, los dos pilotos habían sido detenidos antes del despegue de un avión cargado de maletas llenas de cocaína.
Ambos son objeto desde su fuga de una orden de detención internacional emitida por la justicia dominicana, pero parecen estar definitivamente lejos del alcance de ésta, dado que Francia no extradita a sus ciudadanos.
Esta causa «se ha convertido en un caso extremadamente sensible, y quizás incluso político», comentó el abogado Reinhart al llegar al tribunal.
