Un preso de Georgia (EE.UU.) cuya ejecución está prevista para este jueves solicitó seis cervezas en vez de comida como última voluntad, una demanda que hoy denegaron las autoridades carcelarias.
«Su solicitud ha sido rechazada, ya que el alcohol es un artículo de contrabando», informó en un comunicado el Departamento de Correcciones de Georgia.
En consecuencia, Marcus Johnson, de 50 años, recibirá el mismo menú que el resto de reos en el corredor de la muerte: pescado al horno, sémola de queso, fríjoles, ensalada de col, galletas de postre y, como bebida, ponche de frutas.
Los presos que van a ser ejecutados en Estados Unidos tienen el derecho de elegir su última comida y en su mayoría optan por hamburguesas, papas fritas, pizza o refrescos, entre otros alimentos similares.
Johnson fue condenado por el asesinato en 1994 de Angela Sizemore, una mujer que conoció en un bar y que apareció a la mañana siguiente desangrada en el aparcamiento de un complejo de apartamentos.
Según los testigos, Sizemore estaba en estado de embriaguez y ambos salieron juntos del local. Cuando la Policía lo arrestó, Jackson reconoció haber agredido a la mujer, pero no el asesinato.
Su ejecución está prevista para este jueves a las 18.00 hora local (23.00 GMT) en la prisión de Jackson y es la última programada para este año en el país, ya que la siguiente, la de Oscar Bolin en Florida, será el 7 de enero de 2016.
Si finalmente recibe la inyección letal, Jackson será el cuarto preso ejecutado este año en Georgia.EFE
Diablos que malos
k falta de misericordia…una cervesita no se le niega a alguien k va a ser ejecutado