Es sorprendente y preocupante ver lo que está pasando en la Policía Nacional con sus miembros. Según el jurista Cándido Simón 900 miembros de la institución entre ellos altos oficiales solicitaron sus pensiones y no se las han otorgado porque no hay dinero para pensionarlos.

Danilo Medina habla



Algo espantoso también ha sido la revelación hecha por el presidente del Colegio de Abogados, Surún Hernández, que más de siete mil policías pidieron la baja por descontento alegando las malas condiciones en las que trabajan, lo que está provocando una estampida de sus agentes.

La crisis en este órgano castrense es tan grande que ha provocado movilizaciones en los últimos meses y una gran marcha para el lunes 10 del mes en curso en frente del Ministerio de Interior y Policía, en protesta por la reposición de sus beneficios y aumento salarial, donde se espera la presencia de policías activos, pensionados y sus familiares, algo nunca antes visto en la historia republicana.



Todo ha surgido después de la aprobación y luego promulgación por el presidente Danilo de la Ley Orgánica de la PN 590-16 que deroga el anterior reglamento 96-04 el cual era mejor en cuanto a los beneficios y garantía de pensiones, tanto para ellos como para sus descendientes, esta nueva legislación le ha bajado el autoestima a los hombres de gris de RD.

En la uniformada están aconteciendo cosas muy extrañas, tales como la persecución contra el general que estaba haciendo bien su trabajo en Santiago, Acosta Castellanos y el sargento Fermín Cuevas, quien denunció que sus superiores de la dotación policial de Haina les obligaban a cuidar puntos de drogas. Los militares serios están siendo perseguidos en la PN, en vez de ser premiados para que sirvan de ejemplo a los demás.

Lo que estamos viendo en este momento histórico que vive nuestra Policía Nacional es que si el presidente Danilo Medina no la interviene, su gobierno fracasará en materia de seguridad ciudadana, porque nos quedaremos “sin pito y fin flauta”, o sea sin policiales para cuidar de nuestra ciudadanía y sin seguridad nacional, cosa que agravaría aún más la situación que se vive en el país.

Por el periodista Salvador Holguín