El general retirado Ra­fael Percival Peña, padre del recién abati­do exsoldado y asaltante de bancos John Percival Matos, fue ingresado ayer en la uni­dad de cuidados intensi­vos del Hospital General de las Fuerzas Armadas, tras haber sufrido dolor torácico y “una gran carga de angus­tia”, según reveló anoche el director de ese centro médi­co militar.



Según la máxima autori­dad del hospital, el cardió­logo Agustín Rubén Iglesias Melo, que tuvo a cargo las primeras evaluaciones y es­tudios a Percival y es el res­ponsable de seguir su trata­miento, su vida está fuera de peligro inmediato.

Indica el periódico Listín Diario que en un adelanto no conclu­sivo sobre las causas de la indisposición sufrida por el exoficial ayer, el doctor Igle­sias indicó que las caracte­rísticas clínicas de su dolor de pecho orientan a un pro­blema localizado en las cos­tillas, con parecido a un cua­dro de osteocondritis, “que es la inflamación de la unión de las costillas con el ester­nón, que se ve con mucha frecuencia en pacientes que están sometidos a mucho es­trés”.



Percival Peña fue transfe­rido temprano de la maña­na de ayer en una unidad del sistema de emergencia 9-1-1 al hospital militar, poco después de haber mostrado signos de indisposición físi­ca en la Dirección General de Migración, donde acudió a verificar si se había esta­blecido un impedimento de salida en su contra. De in­mediato, la noticia sobre su condición de salud se espar­ció a través de las redes so­ciales y hasta llegó a especu­larse que había sufrido un infarto, dando lugar a la mo­vilización de los medios de comunicación, que se trasla­daron al hospital a la espera de que los médicos difundie­ran algún informe sobre el estado de salud del paciente. Fue sometido a tres electro­ cardiogramas, con resulta­dos normales. Hasta ahora no ha registrado variacio­nes. También le fueron he­chas las pruebas de sangre de lugar para estos casos cuando hay sospecha de un evento coronario, con resul­tados negativos.

“A Percival lo dejamos en intensivo porque es un pa­ciente diabético, que vino con dolor de pecho y tene­mos que darle la garantía en cuidados intensivos, moni­toreándolo para si hay cual­quier otra eventualidad es­tamos prestos a resolverla ahí”, dijo el doctor Iglesias.