Nueva York. Un juez estadounidense ordenó el jueves una ligera flexibilización de las duras condiciones carcelarias del mexicano Joaquín «El Chapo» Guzmán, uno de los mayores jefes del narcotráfico de la historia, aunque no le permite ver a su esposa.

Los abogados de oficio de «El Chapo», de 60 años, habían reclamado el 13 de marzo una mejora en las estrictas condiciones de detención del exjefe del cártel de Sinaloa, extraditado a Estados Unidos el 19 de enero y encarcelado desde entonces en casi total aislamiento.



El juez Brian Cogan, a cargo de su caso en la corte de Brooklyn, rechazó el pedido de sus abogados de transferir al capo conocido por sus dos espectaculares fugas de prisiones mexicanas a una cárcel con otros presos y de permitir una visita de la ONG de defensa de los derechos humanos Amnistía Internacional, según el fallo al que accedió la AFP.

También negó toda comunicación de «El Chapo» con potenciales testigos de su juicio.



Sin embargo, modificó sus condiciones carcelarias para que «El Chapo» pueda «enviar mensajes previamente monitoreados a su esposa, sujetos a revisión de agencias de monitoreo o de un abogado que hace de intermediario, sobre su elección de un abogado privado, el pago del abogado privado y de naturaleza personal».

Acusado de haber dirigido uno de los mayores imperios del narcotráfico de las Américas, «El Chapo» se declaró no culpable de los 17 cargos de los cuales le acusa la justicia estadounidense. Solo el primero, dirigir el cártel de Sinaloa, puede implicar la cadena perpetua. Su juicio aún no tiene fecha de comienzo.

Los abogados afirman que las actuales condiciones de detención de «El Chapo» violan sus derechos constitucionales, y que sin hablar con su familia no puede saber si tiene suficiente dinero para pagar abogados privados.

Pedían que su joven esposa Emma Coronel, de 27 años, pudiera visitarlo en persona o hablar con él por teléfono para «determinar la disponibilidad de fondos necesarios» para pagar abogados privados.

Pero el juez Cogan tuvo también un fuerte mensaje para la fiscalía: le ordenó que cese «toda comunicación» con el personal del estricto Centro Correccional de Manhattan (MCC) que describan «el contenido de visitas legales basado en observaciones del personal».

En marzo, la fiscalía dijo que «El Chapo» estaba aprendiendo inglés en prisión luego de que un guardia del MCC observó a un asistente legal levantando una hoja de papel y pronunciando una palabra, que luego Guzmán pareció repetir.

Una nueva audiencia previa al juicio tendrá lugar este viernes en la corte de Brooklyn. «El Chapo» estará presente, al igual que su esposa, dijo a la AFP su abogada de oficio Michelle Gelernt.