No se dan tregua. Luego de múltiples provocaciones militares de Corea del Norte , ahora Corea del Sur y Estados Unidos responden con la movilización de los aviones F-22 Raptor, aeronaves que preocupan al Estado de Kim Jong-un.



El ejercicio que llevarán a cabo ambos países aliados durará cinco días (hasta el viernes). «Vigilant Ace» es el nombre de la iniciativa, que inició el lunes por la mañana e involucra a más de 230 aviones, incluyendo cazas furtivos F-22 Raptor, y movilizará a decenas de miles de tropas, según AFP.

Aparentemente es una respuesta al régimen norcoreano, que probó un misil balístico intercontinental (ICBM) hace pocos días, el cual afirmaban que podía alcanzar territorio estadounidense.



Los F-22 Raptors son los principales aviones de combate sigilosos de Washington de la Fuerza Aérea de Estados Unidos. Arribaron a Corea del Sur el sábado para participar en el ejercicio de combate aéreo.

Los expertos indican que estos aviones ‘invisibles’ son la mayor amenaza para Corea del Norte. Estados Unidos reaccionó ante el lanzamiento del misil balístico intercontinental más sofisticado que ha presentado el país de la península coreana, el Hwasong-15.

Ante esta demostración de fuerza, el el Comité de Corea del Norte para la Reunificación Pacífica llamó «loco» a Donald Trump y dijo que los ejercicios «llevarían la situación ya crítica en la Península Coreana al borde de una guerra nuclear», según informó la cadena Reuters.

El diario Rodong de Pyongyang, medio oficial del partido totalitario del país asiático, señaló en su editorial que «es una provocación abierta, a todos los niveles, contra Corea del Norte, que podría desembocar en una guerra nuclear en cualquier momento».