La embajadora estadounidense ante la ONU, Nikki Haley, aseguró que las mujeres que acusaron al presidente Donald Trump de comportamiento sexual inapropiado «deben ser escuchadas», una posición que se desmarca de la Casa Blanca.

Trump ha sido acusado por más de una decena de mujeres de acoso sexual y otro tipo de agresiones, versiones que tanto él como el gobierno han negado repetidamente.



El año pasado, en plena campaña electoral, circuló un video en el que Trump se jactaba de su forma de manosear a las mujeres.



«Las mujeres que acusan a alguien deben ser escuchadas», dijo la diplomática cuando fue preguntada por la cuestión por la cadena CBS el domingo.

La Casa Blanca defiende que el triunfo electoral de Trump zanjó la polémica sobre las acusaciones.

«Creo que las oímos antes de las elecciones. Y creo que cualquier mujer que siente que ha sido violada o maltratada tiene todo el derecho a decirlo», insistió Haley.

«Ya sé que fue elegido, pero las mujeres deberían sentirse siempre seguras de dar un paso al frente y todos deberíamos estar dispuestos a escucharlas», apuntó.

Las acusaciones sobre acoso sexual y violación contra el magnate de Hollywood Harvey Weinstein abrieron la caja de pandora.

Desde entonces han caído tres miembros del Congreso, los actores Kevin Spacey, Louis C.K y Jeffrey Tambor y varios presentadores de televisión muy populares en Estados Unidos.