La defensora del pueblo, Zoila Martínez de Medina, quien estuvo  en El Gobierno de la Tarde, manifestó que la institución recibe al mes unas 700 demandas de servicios, y que la mayoría están vinculadas a Medio Ambiente, como la extracción de materiales del río y temas afines.

Compartió que ante las tantas quejas de los ciudadanos por el Metro de Santo Domingo, fue ella misma a constatar la situación.



“Vi ante las tantas quejas… un desborde de quejas, de que los vagones no alcanzaban y el presidente nos contestó inmediatamente. Pedimos tres vagones y el presidente ofreció 30”, manifestó, aclarando que fue la Defensoría del Pueblo quien gestionó más vagones para el Metro.

Destacó que este país desde su fundación, 1844, ha tenido y tiene millares de defensores de manera natural y que en cualquier callejón o esquina, se alza una voz reclamando justicia.



Ante la pregunta de cómo ha evolucionado la oficina del Defensor del Pueblo, dijo que mucho mejor de lo que esperaba, pero que obviamente, ha dejado la piel en el camino y que incluso, ha adelgazado mucho, porque tuvo que ideárselas para, conforme a un organigrama preparado por el Ministerio Administrativo de la Presidencia (MAP), hacer todo como si fuera un ministerio.

“Lo difícil fue escoger el personal que fue por concurso. Mi familia no trabaja ahí y no pertenezco al comité de concursos. Voy creando conforme lo que demanda la ciudadanía y señalar, que contraté a un asesor, a don Pedro Guerrero, para que nos fuese diseñando todo lo que correspondía a cada funcionario”, explicó.

El defensor del pueblo queda al margen de todo lo que tiene que ver con justicia

Señaló que la ley 1901 tiene muchos baches, y que en el artículo 18 numeral A, se estipula que el defensor del pueblo no puede intervenir si el expediente está judicializado, pero que en algunos casos, median entre las partes para allanar el camino.

“Todo lo que tiene que ver con justicia, el defensor del pueblo queda al margen, salvo que un expediente dure unos cinco o seis años, pero lo hacemos de una manera sin lacerar, porque no nos corresponde”, explicó.

Los casos en las cárceles le impactan

Reveló que cuando va a las cárceles sale muy contrariada viendo la vida de unos que están más o menos bien, otros muy mal, algunos que incluso son inocentes, incluso a otros que ya se le pasó el tiempo.

Citó un caso de una señora de 117 años a quien le reconstruyeron la casa y que la dejó pensando y reflexionando: “Yo llego a mi casa, me baño y me pongo a pensar cómo vivimos y la conformidad de otros con poca cosa”.

Djjo que el pueblo necesita un respiro con la salud, y que a veces intervienen para facilitarle medicamentos a quienes lo solicitan vía Promese Call.

Sobre el Data Crédito invitó que al que tenga un problema al respecto, puede acudir a la institución para armar un expediente y empezar a trabajar sobre el caso.

Fuente z101digital.com