Las ventas mundiales de música registraron un fuerte aumento de 8,1% en 2017, con las ventas digitales aportando por primera vez la mayor parte de los ingresos, informó este martes la Federación Internacional de la Industria Fonográfica (IFPI).
La música grabada ingresó 17.300 millones de dólares y la música digital -hasta el año pasado aproximadamente igual a las ventas físicas en todo el mundo- representó el 54% de ese monto, dijo la IPFI en su reporte anual.
El crecimiento del 8,1% marca el tercer año consecutivo de expansión y el ritmo más rápido desde que la IFPI comenzó a compilar los datos, dijo a periodistas a través de videoconferencia Frances Moore, que preside el grupo.
Pero la industria todavía tiene apenas dos tercios del valor que tenía en la década de 1990, antes de que el crecimiento de Internet y el pirateo hicieran que el negocio de la música entrase en una depresión de 15 años, dijo Moore.
El resurgimiento musical se debe casi por completo al rápido crecimiento de los servicios de streaming -transmisión en línea-, incluidos los de los sitios Spotify, Deezer y Apple Music, que han dado a la industria una nueva fuente de ingresos muy necesaria.
El informe indica que 176 millones de personas en todo el mundo pagaron por suscripciones de transmisión para fines de 2017, con 64 millones que sumaron a lo largo del año, y hay mucho espacio para crecer aún a nivel mundial.
Las ventas físicas volvieron a caer, pero un lado positivo fue el vinilo, que creció 22,3%, ya que los discos encuentran un mercado renovado entre los melómanos.
Stu Bergen, director ejecutivo de los servicios comerciales internacionales y globales de Warner Music Group, advirtió que la industria de la música no debería volverse «complaciente» y se comprometió a que las discográficas invinviertan sus ingresos para desarrollar nuevos talentos.
«Hemos luchado demasiado para llegar hasta aquí y, después de 15 años de declive, todavía hay mucho espacio para crecer», dijo Bergen en la rueda con los medios.