Creemos que el simple hecho de asistir a los servicios de la iglesia o de leer Su Palabra es suficiente; estamos equivocados. Jesús nos enseñó que había algo más profundo que teníamos que conocer y practicar todos los días: la oración.
A través de ella podremos enfrentar los desafíos y conocer el poder ilimitado de Dios. Por eso no podemos ignorar los beneficios que ésta nos aporta, y debemos propiciar este encuentro todos los días en nuestra vida. Siempre hagámoslo en una actitud de humillación, buscando un encuentro divino con Él para que nos guíe y nos muestre Su voluntad, sin importar tiempo ni espacio sino convencidos de que cuando nos acercamos cara a cara Él se mostrará como un amigo.
Busquemos la intimidad que está demandándonos, inclinemos nuestro rostro, doblemos nuestras rodillas y dejemos que Él empiece a susurrar en nuestros oídos Sus planes y proyectos, los cuales nos cambiarán por completo, nos darán una visión renovada y diferente de todo.
No demoremos lo que el Cielo quiere hacer. Tan solo tenemos que apartarnos y decirle: “Muéstrate a mi vida, porque no saldré de este lugar hasta que tenga un encuentro real contigo. No tengo prisa y esperaré todo el tiempo necesario pero quiero verte a Ti”.
Por la pastora Montserrat Bogaert/ Iglesia Monte de Dios
De Humillación ? por eso es que la clase poco pensante de este país vive de rodillas a todos los hombres que quieren controlarle las mentes. No me arrodillo ni ante mi mismo, lacayos ignorantes. Eres lo mas grande que ese Dios, que tanto buscas afuera, ha hecho en la creación divina. Te digo yo que no te le arrodilles a nadie, no hables con seres imaginarios, observate a ti mismo y veras que grande eres.
Muchas Gracias por este mensaje hermoso y sencillo, realmente me hacía falta…
¡ALABADO SEA DIOS!