A todos los padres del mundo que hoy pueden celebrar su Día, no escatimen ni un minuto llénense de algarabía.

Hagan un espacio en el tiempo y en reunión familiar reciban abrazos, besos de aquellos que enseñaste a amar.



Si la vida te ha premiado con los hijos que soñaste bendice el vientre sagrado de tu mujer a cada instante.

Una Madre te hizo Padre, o el destino te escogió, no importa, se responsable, cuentas con la gracia de Dios.

Desde que nace tu niño y lo duermes entre tus brazos tu corazón se hace infinito, sintiéndote privilegiado.

La alegría de ser Padre, no es pura casualidad, es un premio incalculable del que ha sabido criar.