¿Qué diferencia a la gente súper exitosa de los demás? Hay factores conocidos como la ética, la pasión, la inteligencia o el coraje. Pero son los hábitos menos obvios los que hacen que algunas personas se separen del grupo y se vuelvan realmente buenas en lo que hacen. Éstas son cinco cosas que las personas extremadamente exitosas hacen para mantenerse en la cima:
Deciden no fatigarse
¿Sí sabías que el poder de decisión es un recurso que se acaba, verdad? Veámoslo como si éste fuera un tanque de gas. En la mañana, estos tanques están llenos. La mayoría de nosotros empezamos el día tomando pequeñas decisiones, y cada una de éstas utiliza un poco de ese “poder de decisión”, reduciendo poco a poco esa energía disponible para el resto del día. La gente exitosa reconoce que si gasta esta energía en decisiones no relevantes, tendrá menos energía para aquellas que realmente importan en nuestras vidas y negocios. Esta teoría nos explica por qué Mark Zuckerberg (CEO de Facebook) nunca cambia su camiseta gris y sudadera negra y la razón por la que Tim Ferris (emprendedor destacado) decide desayunar lo mismo todos los días.
No tienen miedo de decir NO
Toda la vida nos han enseñado a aprovechar todas las oportunidades, y a decir “sí” a todo lo que se nos presente. ¿Cómo? Intentando equilibrar nuestras prioridades personales, sin olvidar que también somos parte de un equipo. Y es justo esta actitud la que nos termina deteniendo. El multimillonario Warren Buffett afirma que la diferencia entre la gente exitosa y la gente súper exitosa es que la segunda dice que no a casi todo. Siempre que dices “no” a una obligación no tan prioritaria, obtienes más tiempo y energía para ir detrás de lo que realmente quieres.
Aprecian la calma
Generalmente, las personas súper exitosas tienen los recursos necesarios para emprender aventuras, viajar y probar cosas distintas, obteniendo así nuevas habilidades. Pese a que estas personas tienen la oportunidad de tener una vida muy excitante, también saben valorar los momentos de calma porque entienden que el desarrollo personal y de negocios muchas veces es resultado de un proceso lento y que va paso a paso. Michael Phelps (medallista olímpico), no se convirtió en el nadador más rápido del mundo de la noche a la mañana. Lo hizo adoptando una rutina rígida consistente en la repetición de series. Dominar una habilidad requiere seguir una rutina. Muchos atletas, artistas, empresarios y líderes de negocios han aprovechado esta repetición para dominar su campo.
No intentan mejorar sus debilidades
Seguramente en alguna entrevista has escuchado la molesta pregunta: “¿cuál es tu mayor debilidad y qué has hecho para intentar mejorarla?”. A lo que la mayoría de nosotros respondería: “me esfuerzo para estar más centrado”, “trato de ser más paciente”, “intento mejorar mi comunicación verbal”. Las personas súper exitosas no piensan de esta manera. Ellas ven este “esfuerzo” por mejorar sus debilidades como una pérdida de tiempo, y prefieren canalizar esa energía en áreas donde sobresalen de forma natural.
Se despiertan antes de que salga el sol
Líderes de negocios como Richard Branson, Margaret Thatcher y Howard Schultz se levantan antes de que el sol aparezca. Mientras la mayoría de nosotros duerme, ellos ya están meditando, ejercitándose y siendo productivos.