John Bolton, el exconsejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, dijo este lunes que está dispuesto a declarar si es convocado por el Senado de Estados Unidos durante el juicio político al presidente Donald Trump.

Los demócratas creen que el exasesor, quien dejó su puesto en septiembre de 2019, tiene conocimiento directo que sostendría las acusaciones de abuso de poder y obstrucción al Congreso que la Cámara Baja presentó contra el presidente.



Pero Bolton, un veterano de Washington que fue despedido en septiembre pasado por Trump, no ha revelado si su testimonio podría perjudicar al presidente o ayudarlo.

Hasta ahora el líder republicano del Senado, Mitch McConnell, ha dicho que no quiere llamar a testigos para que participen en el juicio, que se espera se llevará a cabo este mes.



Nancy Pelosi, la presidenta de la Cámara de Representantes, ha declinado enviar al Senado los artículos de impugnación aprobados por la Cámara hasta que se hayan establecido las reglas básicas del juicio.

«Basándome en cuidadosa consideración y estudio he concluido que, si el Senado emite un citatorio para presentar mi testimonio, estoy preparado para declarar», dijo Bolton en una declaración.

La Cámara de Representantes acusó a Trump de pedir a Ucrania que investigara a uno de sus rivales potenciales en las elecciones presidenciales de 2020, el exvicepresidente Joe Biden, y ejercer presión para obtener su objetivo, entre otras cosas, congelando ayuda militar crucial para ese país del este europeo en conflicto con separatistas pro-Rusia.

Durante las audiencias para el ‘impeachment’ en la Cámara Baja, los asesores del Consejo de Seguridad Nacional de Bolton dijeron que les había dicho que hablaran con los abogados de la Casa Blanca tras los esfuerzos de Trump para que Ucrania investigara a Biden.

El exconsejero, considerado un ‘halcón’ en Washington por su línea dura hacia Corea del Norte, Cuba y Venezuela, es uno de los cuatro funcionarios del gobierno de Trump que los demócratas quieren como testigos.

Por su parte, la Casa Blanca proclamó su privilegio ejecutivo para impedir que esos cuatro funcionarios -además de Bolton, el jefe de gabinete, Mick Mulvaney; el asistente de Trump Robert Blair, y el funcionario de la Oficina de Administración y Presupuesto Michael Duffey- declararan durante la investigación parlamentaria.

– «Encubrimiento» –

Sin considerar la buena voluntad de Bolton, el citatorio y su testimonio no son un hecho. Los republicanos cuentan con una mayoría de 53-47 en el Senado, y se espera que buena parte de esos legisladores apoyen a Trump.

La emisión de citatorio requeriría el apoyo mayoritario de los senadores, lo que significa que varios republicanos tendrían que unirse a los demócratas. El senador republicano Mitt Romney dijo que estaría a favor.

«Me gustaría poder escuchar a John Bolton (…) Tiene información de primera mano y eso es algo que me gustaría escuchar», dijo Rommey.

En su declaración, Bolton señaló que la cuestión constitucional de la capacidad de Trump para bloquear su testimonio no se resolvió en el tribunal antes de que la Cámara Baja votara para el juicio político del presidente el 18 de diciembre. Incluso sin un fallo judicial sobre el tema, Bolton sugirió que estaría listo para presentarse.

Citando el juicio político del presidente Bill Clinton en 1999, McConnell dijo que la decisión de llamar a los testigos sólo debe tomarse después de que el juicio haya comenzado.

El líder de la mayoría en el Senado denunció la investigación que hizo la Cámara de Representantes como «injusta» y acusó a los demócratas de ser una amenaza política en un momento de crecientes tensiones con Irán.

«Incluso con las crecientes tensiones en Oriente Medio, los demócratas de la Cámara de Representantes están haciendo del juicio político un juguete político», dijo.

«En este momento peligroso, los demócratas de la Cámara de Representantes continúan jugando juegos políticos con su impeachment partidista del comandante en jefe».

Pelosi replicó que Trump y McConnell «deben permitir que los testigos clave testifiquen» para que los estadounidenses puedan «ver los hechos por sí mismos».

«El Senado no puede ser cómplice del encubrimiento del presidente», dijo.

El legislador demócrata Adam Schiff, que dirigió la investigación del juicio político en la Cámara de Representantes, también pidió que Bolton testifique.

«Bolton es un testigo importante de la mala conducta que involucra a Ucrania y que él llamó ‘negocio de drogas'», dijo Schiff.

«Bolton se negó a testificar en la Cámara, siguiendo las órdenes de Trump. Ahora está dispuesto a presentarse», dijo.

«El Senado debe permitir el testimonio de él, de Mulvaney y de otros. El encubrimiento debe terminar».