Los Angeles, Estados Unidos. Una mujer estadounidense, que fue acusada por andar en su casa con los pechos al aire frente a sus hijastros, llegó este martes a un acuerdo con la fiscalía en Utah para evitar ir a un juicio que hubiera podido llevarla al registro de delincuentes sexuales.

Tilli Buchanan «siguió mi consejo de no (ir a juicio), no porque no pensara que no podía ganar, pero porque existía la posibilidad que si íbamos a juicio podría ser condenada por un jurado y entraría en el registro», dijo su abogado, Randy Richards, a la prensa local.

Tilli Buchanan sonríe al salir de la corte de la jueza Kara Pettit en Salt Lake City, Utah, el martes, 19 de noviembre del 2019. Buchanan enfrenta cargos criminales luego que sus hijastros la vieron con el torso desnudo en su casa. (LEAH HOGSTEN/THE SALT LAKE TRIBUNE VÍA AP)

Buchanan había sido acusada de tres delitos lascivos menores que involucraban a un niño después de que sus tres hijastros -de entre 9 y 13 años- la vieran desnuda de la cintura para arriba mientras hacía un trabajo en su garaje con su esposo.

El marido estaba también sin camiseta pero no fue inculpado.

La pareja explicó que se quitaron las camisetas para evitar ensuciarse.

Buchanan fue acusada a comienzos de 2019 luego que la madre de los niños reportara el incidente a las autoridades.

Argumentó, según documentos legales, que si su esposo podía mostrar el pecho desnudo, no había razón para que ella no pudiera hacerlo.

Pero los fiscales no estuvieron de acuerdo, explicando que el concepto de indecencia en la sociedad americana contemporánea incluye que una mujer muestre sus senos.

En el acuerdo con los fiscales, Buchanan admitió haber expuesto sus pechos frente a un adulto, que sería el esposo, causando «afrenta o alarma».

El cargo será retirado después de un año siempre y cuando no cometa otro delito.

Richards se preguntó si ahora Buchanan «o cualquier otra mujer tendrán que preocuparse que sus hijos las vean desnudas».

La Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU) en Utah, que estuvo involucrada en el caso, dijo que los cargos contra Buchanan representaban un exceso de la fiscalía y que nunca debieron llegar hasta este punto.

«Cuando hablo con la gente sobre este caso, creo que nadie se había dado cuenta de que te pueden acusar de un delito por andar sin camisa dentro de tu propia casa», dijo anteriormente la abogada de la ACLU, Leah Farrell, al New York Times.