El propietario chino de Grindr anunció haber concluido un acuerdo para vender a una empresa estadounidense la aplicación de encuentros para homosexuales, tras presiones de Estados Unidos por razones de seguridad nacional.
En un comunicado enviado a la Bolsa de Shenzhen, el especialista de juegos en línea Kunlun Tech informó que había llegado un acuerdo para vender el 98,59% que posee en Grindr, por un monto cercano a los 608,5 millones de dólares (unos 539,1 millones de euros).
El comprador es el holding estadounidense San Vicente Acquisition LLC.
Grindr, una aplicación fundada en 2009, dice contar diariamente con más de 4 millones de usuarios gays, lesbianas, bisexuales, transexuales y ‘queer’ (LGBTQ) en todo el mundo.
Kunlun Tech había pagado 93 millones de dólares (82,4 millones de euros) en 2016 para adquirir el 60% de Grindr. En 2018 se hizo con el 100% del capital al desembolsar otros 152 millones de dólares.
Pero cuando la aplicación pasó a ser propiedad china, la agencia federal estadounidense centró su atención en ella.
Kunlun anunció en mayo de 2019 que había firmado un acuerdo con el Comité para las Inversiones Extranjeras en Estados Unidos (CFIUS), por el que se comprometía a vender la aplicación antes de junio de 2020, pero sin explicar las razones de la decisión.
Según informaciones del Wall Street Journal, el CFIUS habría ordenado a Kunlun que vendiera Grindr por razones de seguridad.
Esta agencia federal, encargada de examinar las consecuencias para la seguridad de las adquisiciones de grupos extranjeros en Estados Unidos, temía que los usuarios estadounidenses de esta aplicación pudieran ser víctimas de chantaje si el gobierno chino exigía datos (orientación sexual, salud…) a Kunlun Tech.
Según el WSJ, CFIUS estaba preocupado por una ley china de 2017 que obliga a las empresas del país cooperar con los servicios de inteligencia.
La venta de Grindr coincide también con la creciente preocupación en algunos países occidentales sobre la protección de datos de usuarios de la aplicación.
El Consejo Noruego de Consumidores acusó a mediados de enero a Grindr de compartir datos GPS, dirección IP, edad y sexo de los usuarios con gran número de actores que quieren personalizar la publicidad, lo que es ilegal y «una violación descabellada de los derechos europeos de confidencialidad de usuarios», según dicho consejo.
La venta a San Vicente Acquisition LLC debe ser aprobada por el CFIUS, precisó Kunlun en un comunicado.
Según varios medios estadounidenses, CFIUS ha abierto una investigación nacional sobre la compra por el gigante chino de internet ByteDance de TikTok, de una aplicación para compartir vídeos que utilizan los adolescentes en todo el mundo.